Bugatti EB110 Cyan de 1994, fiel a su estirpe

Creado: Vie, 22/10/2010 - 15:15
Créditos
Jorge Esténger Wong
Bugatti EB110 Cyan de 1994, fiel a su estirpe

Desde su comienzo Ettore Buggatti mantuvo relaciones muy estrechas de cooperación con varios constructores de carrocerías en Francia y otros países. Por ésta razón es conocido que muchos ejemplares Buggatti comparten características técnicas, pero tienen imágenes diferentes. Esta tradición trató de mantenerla Romano Artioli, cuando desde 1989 y hasta mediados de los noventa, obtuvo los derechos sobre la marca, la cual había cesado su producción con la muerte de Ettore Bugatti en 1947.  Así fue presentado el EB110, un modelo para honrar el 110 aniversario del genial constructor italiano, de ahí que la denominación del modelo sea esa, en alusión a Ettore Buggatti 110 años (EB110).  Fue presentado al público en Grande Arche en La Défense, París.

Este fascinante auto tuvo una versión espectacular presentada por el carrocero suizo Rinspeed Desing, a mediados de los años 90.  Fue un paso radical del modelo base, ya de por sí extremo. El EB110 traía estándar el motor GT de 540 CV, pero a la versión suiza (llamada Cyan, por su color) esto no le era suficiente y llevó la cota de potencia hasta la redonda cifra de 600 CV, con 637 Nm de torque.  De igual forma, el sistema de escape, y toda la sección trasera, fue rediseñada por la famosa compañía Remus.  Un sistema de tracción total se encargaba de llevar al pavimento en descomunal despliegue del motor.  Los resultados eran de clase mundial, incluso para nuestros días: de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos y una velocidad máxima de 350 km/h.

El diseño de la carrocería fue modificado y mejorado, con un frente mucho más agresivo donde se ubican generosas entradas de aire para los radiadores. El típico radiador con la forma Bugatti era en realidad empleado como otra entrada de aire, pero dirigida al sistema de aire acondicionado.  De igual forma fueron mejorados detalles como los ángulos de los espejos retrovisores, y los alerones traseros eran de los más avanzados de la época con criterios de Fórmula Uno para asegurar una fuerza de empuje hacia abajo, cuando se alcanzaran altas velocidades. El interior, por supuesto, estaba decorado con todo cuidado, con pieles escogidas y a tono con el tradicional azul de Bugatti. Para completar un soberbio estéreo de Nackamichi ponía al Bugatti EB110 Cyan de 1994 en el rango de los 350 000,00 dólares.

Desafortunadamente, fue un mal momento para el mercado de los súper autos y la compañía Bugatti fue obligada a declararse en bancarrota. Para finales de los noventa el grupo Volkswagen obtendría los derechos sobre la marca, comenzando el espectacular revival que todos conocemos hoy.

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Jorge Esténger Wong