Capricee Impala 1977: una nueva era en Chevrolet

Creado: Dom, 16/04/2017 - 17:31
Créditos
Jorge Esténger Wong
Capricee Impala 1977: una nueva era en Chevrolet

Más grande, cómodo y exuberante.  Pocos cambios mecánicos.  El mismo perro, con diferente collar. Por ese camino, un Chevy Caprice 1973 llegó a medir casi lo mismo al Cadillac, con 5,6 metros de longitud, casi 2 toneladas de peso y un motor V8 de 6,6 litros, de apenas 150 CV.  Y llegó el crack petrolero.

No hubo opción: los autos tenían que reducirse.General Motors lanza programa de vehículos más razonables, a un costo de 600 millones de dólares.  Por supuesto, semejante despliegue urgía de resultados en las cuentas.  Para ello General Motors hizo una vasta campaña publicitaria para hacer la promoción del ”Nuevo Chevrolet“: el Caprice 1977.

Allá se lanzó la prensa a reseñar que era un auto más ”apropiado para la época“, menor tamaño –la palabra compacto era un pecado- y, no obstante, mayor espacio para cabeza, piernas y maletero.  Motor Trend tragó en seco - ¿o no? - y le otorgó su premio ”Auto del Año“.

En verdad,hubo cambios.  Los vehículos se ”encogieron“ con un chasis para toda la gama Caprice-Impala de 2,9 cm que permitiría una drástica reducción de peso: 277 kilos para los cupés, 289 kilos para los sedanes de 4 puertas y 395 kilos para las camionetas.  Esto permitió emplear motores más pequeños.  Ahora, era estándar un seis cilindros de 4,1 litros – si esto puede llamarse pequeño – y 110 CV, aunque existía la opción de dos motores V8: uno de 5,0 litros y otro de 5,7.   La única transmisión disponible era la caja automática Hydra-Matic.

El Chevrolet 1977 de gran formato venia en dos series: Impala y Caprice, de lujo.  Fue importante la demanda del Impala sedan, de 4 puertas, como taxi o patrulla de policía. Por fortuna para Chevrolet –y para toda General Motors- el público responde muy favorablemente a estos modelos, con ventas que saltan de 184,639 autos en 1976 a 341,382, solo en 1977.  La producción total de la serie Impala-Caprice fue de 661,661 unidades.

Sin dudas, los cambios no son radicales.  Apenas los necesarios para atrapar al mercado y esto se logra de tal forma que el Caprice permanece casi inalterable por varios años.   Hoy, ha adquirido valor como auto de época y colección, llegando a ser considerado como uno de los mejores modelos populares de su época.

Créditos
Jorge Esténger Wong