Daymak C5 Blast

Creado: Sáb, 29/07/2017 - 13:04
Créditos
Willy Hierro Allen
Daymak C5 Blast

Sale más rápido que cualquier automóvil de producción en serie, con una aceleración descomunal, el kart Daymak C5 Blast prueba la importancia de la relación peso/potencia en los vehículos deportivos y, además, anuncia la superioridad (otra vez) de la propulsión eléctrica ante nuestro ya anticuado y bien amado motor de combustión interna.

Todo parece indicar que los jóvenes ingenieros de mitad del siglo XXI, ya hablarán de la historia los motores de combustión interna, de dos y cuatro tiempos, así como hoy nos referimos al propulsor de vapor. Y pensar que los primeros automóviles fueron eléctricos porque no existía un motor de gasolina hasta que Daimler y Maybach lo construyeron.

Pero cambiemos la nostalgia por el asombro ante el enorme torque desde el reposo, de este kart y veamos sus características. El Daymak C5 Blast tiene un ingenioso sistema que combina un motor eléctrico de 10 kW (unos 13.6 CV) y una docena de ventiladores (cuatro de ellos en la parte trasera del kart) repartidos en la carrocería (incluidos los costados).

Este sistema hace que el Daymak C5 Blast tenga un torque de 282 Nm, lo cual le permite salir ”como una bala“ en línea recta para que, entre 1.5 y 1.6 segundos, alcance 100 km/h.

Una aceleración realmente impactante. Y es de esperar que pronto sea registrado oficialmente y aparezca en el Libro de los Récord Guinness. El récord actual es de 2.635.

Es obvio que el límite de velocidad aumente a medida que acelera el kart, debido a su estructura y peso (menos de 200 kilogramos), el tipo de los neumáticos y tamaño del motor, todos los cuales son impedimentos para alcanzar mayor velocidad con la estabilidad requerida. Pero de que su gran aceleración impresiona, no hay dudas.

El proceso de fabricación del Daymak C5 Blast es muy artesanal, de ahí su elevado precio (unos 60 000 dólares) y los plazos de entrega (se fabrica a pedido), que oscilan entre 60 y 90 días (dos o tres meses). Rápido, libre de emisiones y silencioso ¡cuánta diferencia del kart que tenemos hoy!

Créditos
Willy Hierro Allen