El Ferrari rojo, blanco, con la nariz más corta y 1,5 segundos 'más rápido' se presenta

Creado: Jue, 18/02/2016 - 08:47
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El Ferrari rojo, blanco, con la nariz más corta y 1,5 segundos 'más rápido' se presenta

”En lo que respecta al motor estoy convencido de que ha alcanzado el nivel de rendimiento de Mercedes. Con el chasis esperamos encontrar la competitividad que nos faltó el año pasado“. Massimo Rivola, exdirector deportivo de Ferrari y actual responsable de la cantera de la Scuderia, desató cierta euforia la semana pasada con sus predicciones sobre el monoplaza que este viernes se descubrirá a las 14:00 horas a través de internet. Sin capacidad de juzgarle por sus atributos hasta que no ruede sobre el asfalto de Montmeló la semana que viene (o en Australia, mejor), sí se podrá esgrimir alguna opinión sobre su apuesta por el tinte blanco, un color familiar del equipo de Maranello.

”Al principio, cuando oí que el blanco va a volver, estaba un poco desconcertado. En el equipo, en algún momento se dijo que el blanco no trae buenos resultados a Ferrari“. El expiloto ferrarista Iván Capelli habla (para 'La Reppublica') de su época de los 90 en la que el F93A de Berger y Alesi finalizó cuarto en Constructores con una línea blanca que rodeaba la zona del cockpit. No obstante, echando la vista atrás, en la época de los 70 a Lauda, Regazzoni, Reuteman, Villeneuve y Scheckter no les fue mal con un monoplaza de similar estilo logrando los títulos de 1975, 1976, 1977 y 1979 con diferentes versiones del 312T. Antes, John Surtees parece que inspiró tales modelos con su bólido rojo y casco y mono blanco. Al inglés tampoco le fue mal con su título de 1964 en sus tres años corriendo con el escudo del Cavallino Rampante.

Otros aspectos externos que podrán ser analizados son los que avanzó el especialista Giorgio Piola, quien aventuró que el nuevo modelo tendrá una 'nariz' más corta (similar a la de Mercedes y Toro Rosso en 2015), variaciones en la suspensión delantera (del 'pull rod' al 'push rod'), pontones laterales inferiores y caja de cambios más estrechos. Aunque su mayor revolución se encuentra en el interior, su propulsor, el elemento más importante y diferenciador que también se ajustaría más de tamaño en favor de una evolución aerodinámica.

Rivola atreve a compararse con Mercedes, es decir, con 900CV que ayudarían a convertir a este Ferrari 1,5 segundos más rápido que su predecesor, según apuntan algunas fuentes desde la prensa italiana. La cuestión es que esos cálculos del banco de pruebas -a día de hoy especulación, no información-, coincida con la realidad del asfalto y que los rivales no sean 1,6 segundos más rápido (por ejemplo) para calificar de positivo ese hipotético avance. De confirmar un avance así significaría una evolución histórica. ¿Suficiente para ser el monoplaza ganador? A día de hoy parece prácticamente imposible arrebatar ese honor a las Flechas Plateadas, pese a las consecuencias 'trágicas' que pudiera llevar para Sergio Marchionne. Afortunadamente para el presidente ferrarista, desde 2017 se verá otra película.

Recapitulando: Ferrari tiene dibujado un coche con el gusto por el blanco, elementos externos que diferenciarán este monoplaza con el pasado SF15T y 1,5 segundos pululando por el aire… Al margen de esto, ¿para qué sirve una presentación de un coche de Fórmula 1? Su objetivo es básicamente comercial. Lucir las pegatinas y, al contrario de lo que pueda aparentar, mostrar lo menos posible las novedades que puedan ser determinantes o susceptibles de ser analizadas por los rivales. En el caso de Ferrari, este día parece más especial por ser la escudería más mediática e importante de la parrilla, pero realmente enseña lo mismo que el resto: sus sponsors (De hecho, de la presentación de este miércoles de Red Bull se especula que fuera el coche del año pasado y las pegatinas de este 2016).

Ocultar pistas en la presentación es el paso previo de esconder cartas a los rivales en los primeros test, que tendrán lugar la semana que viene en el Circuit de Catalunya. Allí la fiabilidad se buscará desde el inicio para, poco a poco, ir comprometiendo al vehículo y comprobar cuánto se puede estirar, qué rincones se pueden explorar, hasta dónde se puede exprimir el motor… Los datos aún verdes, inmaduros, que los ingenieros vayan recopilando dictaminarán si son ciertos ese desarrollo de 1,5 segundos y podrán predecir si el blanco del coche de Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen será el de Lauda o el de Alesi.

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