El Opel Kadett, GMC y un poco de historia

Creado: Dom, 22/01/2012 - 16:46
Créditos
Jorge Esténger Wong
El Opel Kadett, GMC y un poco de historia

Hoy, cuando la General Motor (GMC) tiene a Opel sobre las cenizas ardientes de una indecisión crónica en el tema de su posible venta o extinción, muchos miran hacia la historia del vínculo carnal que ambas compañías mantienen desde los años treinta del pasado siglo, el cual no se quebró ni en la etapa más oscura de la historia moderna de la humanidad: la Segunda Guerra Mundial (SGM). Muy lejos de ello, son bien conocidas las maniobras de la dirección de GMC sobre su filial alemana y la opinión del jerarca de GMC en 1939, Alfred P. Sloan, quien definió sus operaciones en Alemania como ”altamente rentables".

Tanto lo eran, que James Mooney –a cargo de las operaciones ultramarinas del gigante norteño– mantuvo conversaciones con Adolf Hitler en persona, apenas dos semanas después de la invasión de este a Polonia. Resultado: las maquinarias de Opel –léase GMC– continuaron produciendo para el régimen alemán.  Mientras la producción fue civil, buena parte de los ”excelentes resultados“ que tanto agradaban a los jefes de GMC, se debían a las magníficas ventas del modelo Kadett, el cual había aparecido justo antes de la SGM.  

Siendo presentado en 1936, el Kadett, contaba con un motor de 1074 cc de desplazamiento. De inmediato el pequeño automóvil fue todo un éxito, colocándose como líder de ventas en Alemania. Cuando cesó la producción civil en las factorías GMC alemanas, en 1941, se habían producido 107.000 unidades. Una vez finalizada la SGM, paradójicamente, la maquinaría utilizada para el montaje del Kadett fue trasladada a la Unión Soviética en concepto de reparaciones de guerra, sirviendo de base para el Moskvich 400, pues el modelo que estaban desarrollando los soviéticos a la sazón, el Moskvich 10, fue desaprobado por el propio Stalin, a quien desagradaban sus faros frontales y el hecho de que solo disponía de dos puertas. En cambio, se mostró satisfecho del vehículo alemán, el cual se mantuvo en la línea de producción rusa como Moskvich 400 hasta 1956.

Hoy, luego de tantos años, esto es historia. Opel prepara un nuevo modelo (Mokka) el cual, como vínculo con sus orígenes –Opel surgió como una fábrica de máquinas de coser y bicicletas, en  1896–, ofrece un sistema para transportar hasta tres bicicletas, y esperemos que le permita una mejor estima dentro de GMC, como antaño.

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Jorge Esténger Wong