El Ferrocarril Austral Fueguino (FCAF) es la vía férrea funcionando más al sur del mundo, en la zona de la Tierra del Fuego, cerca de la Antártida. Su historia es lúgubre y cargada de leyendas, fue conocido como El Tren de los Presos pues su función original era el abasto de insumos y personal a la cárcel de Ushuaia, en el extremo austral de la Argentina.
La gran mayoría de los pasajeros que hoy viajan en El Tren del Fin del Mundo, son turistas que visitan el Parque Nacional Tierra del Fuego, muy cerca de la actual ciudad de Ushuaia, en el extremo sur de la República de Argentina. Este ferrocarril está ligado a la historia local por su importancia en el desarrollo de toda esa zona y, además, porque tras más de un siglo de existencia sigue en función, aunque con diferentes objetivos: antes cargaba afligidos presos sin esperanzas, ahora alegres turistas de paseo.
La historia de este tren comienza en 1909 con la construcción de una vía férrea (que tenía rieles de madera) para uso del Penal de Ushuaia, pero tiene aun un tenebroso antecedente: la colonia penal de la Isla de los Estados, fundada cerca del faro San Juan del Salvamente y trasladada más tarde al centro de la Isla. En 1889, con vistas a mejorar las condiciones carcelarias, deciden reubicar la prisión en la Isla Grande y pasan a los primeros reclusos en 1902.
La nueva cárcel se construye al este de la aldea de Ushuaia, fundada en 1884, hoy convertida en ciudad y capital de la provincia Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, Argentina. El nombre de Ushuaia viene del idioma Yagan (aborígenes locales), que significa ush ”al poniente o al fondo“ y waia ”bahía o caleta“. El Penal de Ushuaia funcionó de 1904 a 1947, época en que albergó a muchos delincuentes de alta peligrosidad (como el famoso asesino en serie ”Petiso el Orejudo“ o el anarquista Simón Radowitzky, que mató al Jefe de Policía) y presos políticos (como José Berenguer, editor del diario La Protesta). En 1947, el presidente Juan Domingo Perón, clausuró definitivamente el penal por razones humanitarias.
El ferrocarril, llamado entonces Tren de los Presos, llevaba vituallas, leña y personal a la cárcel y al pueblo, contribuyendo con el desarrollo local. En el año 1949, hubo un fuerte terremoto en la Tierra del Fuego que afectó las vías del tren y, sin posibilidad de recuperación, el servicio fue finalmente suspendido en 1952. Ya habían pasado más de 40 años cuando Tranex Turismo S.A. se decide a revivir las historias y leyendas del Tren del Fin del Mundo y hace los últimos 8 km del trayecto original, que era antes de 25, en el año 1994. Y este nuevo ferrocarril de turismo, que lleva visitantes al Parque Nacional Tierra del Fuego, tiene lujos a bordo que no soñaron sus otrora pasajeros, tal como champagne o un excelente servicio de comedor.
En 1995 se trajo una locomotora de vapor (2-6-2T) de Inglaterra, que funciona con otra hecha en Argentina y tres más diesel. El tren sale de la Estación Fin del Mundo, a 8 km al oeste de Ushuaia, y pasea por el Valle Pico, en la Garganta Toro, hasta la Estación Cascada de la Macarena. El antiguo penal ahora es un museo, que cuenta hoy historias de terror. Hay planes para hacer una estación más cerca de la ciudad y unirla a ésta por un tranvía. ¡Cuánto contraste en el mismo lugar y con el mismo tren!
Ni el preso más soñador podía imaginar este final feliz de aquel fatídico tren que lo transportaba en su triste viaje a la cárcel.