Lo último de la casa de Maranello se llama Ferrari California T y sí, la 'T' es de Turbo, como no podía ser de otra forma. La íntima relación de la marca italiana con la Fórmula 1 ha motivado el lanzamiento de su primer deportivo moderno con propulsor turboalimentado aunque, en el caso del California, no se trata de un bloque pequeño y eficiente, sino de un V8 elevado a 560 caballos, 70 más de los que entregaba inicialmente el bloque atmosférico.
Con este nombre, el California T nos obliga a comenzar hablando de su mecánica, totalmente nueva. El motor V8 Turbo presenta una cilindrada algo inferior que el atmosférico al que reemplaza. Ya no es un 4.3 litros sino un 3.9 –3.855 cc.– que desarrolla 560 caballos a 7.500 rpm y entrega un par máximo de 755 Nm a 4.750 rpm, 50 Nm que el atmosférico anterior.
Este baile de cifras se traduce en sensaciones al volante y cómo no, en prestaciones. El California T pasa de 0 a 100 km/h en 3,6 segundos y alcanza una velocidad punta de 316 km/h, resulta bastante más rápido pero es que además, consume menos. Los datos oficiales reflejan un gasto de 10,5 l/100km y sus emisiones de CO2 son de 250 gr/km por los 13,1 l/100km y 299 gr/km del California anterior.
Aunque, por supuesto, la mejora de estos datos no se debe sólo a la adopción de este 3.9 Turbo. El nuevo Ferrari California cuenta también con el mejorado control de tracción F1-Trac, así como con una nueva caja de cambios –automática de doble embrague– y con un chasis con amortiguadores y muelles Magnaride que son un 50% más eficaces que los anteriores. Para completar este conjunto, los técnicos de Maranello han dotado al convertible de un equipo de frenos carbocerámico CCM3.
Por lo demás, el nuevo Ferrari California también introduce algunos cambios estéticos importantes en relación a la generación anterior. Su frontal recibe una parrilla más amplia, el capó luce dos entradas de aire laterales y la trasera queda realzada con un gran difusor de aire que separa los cuatro tubos de escape, situados dos a cada extremo del coche, mientras que el parachoches y las llantas también contribuyen a darle un aire distinto al conjunto.
Por otro lado, el interior conserva sus 2+2 plazas y su decoración habitual pero llama la atención el nuevo volante, con más controles que el anterior, así como la pantalla central, de mayor tamaño y el indicador de soplado del turbo, que encuentra un lugar privilegiado en el centro del salpicadero, entre los dos aireadores centrales.
El Ferrari California T se presentará oficialmente en el Salón de Ginebra, el próximo mes de marzo y llegará a los concesionarios poco después. Su precio superará los 200.000 euros.