Puesta a imaginar ”un verdadero auto deportivo“ —como reza su eslogan promocional— a Mercedes-Benz se le ocurrió concebir un carro capaz de opacar a Tiger Woods sobre el césped de Augusta y el resultado ha sido el Style Edition Garia Golf Car.
Sí, un carrito de golf, aunque no uno cualquiera, pues con él la marca de la estrella afirma haber reinventado este género de vehículos y es casi seguro que a más de uno (incluyendo al propio Woods) le gustaría tenerlo.
Y es que el Garia —llamémoslo así para abreviar— parece tenerlo todo y no solo para jugar unos hoyos, pues sus elementos prácticos van desde un alerón trasero capaz de transformarse en soporte para dos bolsas de palos de golf hasta una nevera bajo el asiento, epítome de lo que todo auto que se precie debería tener para contribuir al ocio.
Aunque el fabricante ha ido más allá y la carrocería de este biplaza eléctrico, por ejemplo, se parece más a un Smart que a un Mercedes, y llama la atención con la parrilla inspirada en una pelota de golf rematada por afilados faros Led.
Entretanto, su interior pudiera catalogarse una suerte de ”pequeño salón móvil“ con un diseño completamente renovado, en el que destaca una pantalla de alta resolución de 10.1 pulgadas que ofrece la información más pormenorizada y permite a la vez controlar diversas funciones con el simple toque de un dedo para resaltar lo dicho: sin duda estamos ante el monumento a la flojera humana. Uno que logra alcanzar una velocidad máxima de 30 km/h, con una autonomía de 80 km gracias a una batería de iones de litio.
No en vano, al valorar esta creación el jefe de diseño de Daimler AG, Gorden Wagener, afirmaba que ”Mercedes-Benz es sinónimo de lujo moderno, y el golf es evidentemente un actor de este lujo. Es un deporte muy activo, pero también exclusivo, ostentoso“.
Tanto es así, que de momento solo dos ejemplares están programados para fabricarse, aunque teniendo en cuenta la fiebre golfista que despertará en más de uno este carrito, es casi seguro que veamos pronto su producción en serie.