Los preparadores norteamericanos que trabajan bajo el nombre de Hennessey Performance Engineering han creado cuatro programas de ajuste para el Chevrolet Corvette que elevan la potencia hasta los 608 CV, los 710 CV, los 811 CV o hasta la friolera de los 1.014 CV.
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Para el primer ajuste, denominado HPE600, el motor de serie con ocho cilindros en ‘V’ y 6,2 litros de cilindrada está equipado con un sistema de compresión TVS2300, un novedoso sistema de inducción de aire firmado por la propia HPE –Hennessey Performance Engineering- y una revisada centralita, lo que permite llevar al Corvette hasta los 608 CV.
El segundo ajuste se denominado HPE700, que añade un personalizado árbol de levas y retoques en los cilindros del motor, lleva al propulsor hasta los 710 CV.
Para el tercer nivel de preparación, bajo el nombre de HPE800, Hennessey utiliza un motor biturbo con un árbol de levas también personalizado y pistones y cigüeñal fabricados en aluminio forjado. Además, añade un sistema de escape deportivo de acero y una nueva ECU –centralita- que lleva al propulsor hasta los 811 CV.
En último lugar, y no menos importante, nos encontramos con el nivel superior HPE1000, que, aunando todo lo anterior, es capaz de llevar al Chevrolet Corvette a unos increíbles 1.014 CV.
Todos y cada uno de los ajustes permiten incorporar un ‘kit’ exterior –conocido como ‘CarbonAero’- que viste al modelo norteamericano con un splitter delantero, faldones laterales y un alerón trasero.
Para los que tengan el ‘gen de piloto’ más en alza, se ofrecen frenos cerámicos de carbono, suspensión ajustable y llantas de aleación con neumáticos Michelin Pilot Super Sport.
Para aquellos que quieran saber precios, sólo hay que pedir presupuesto. Lo mejor es soñar con que una de estas máquinas con la mecánica llevada al límite caiga en nuestras manos.