Con la llegada a Roma y la ceremonia posterior en el Ministerio de Asuntos Exteriores finalizó oficialmente la duodécima expedición organizada por Iveco conocida como Overland. En esta ocasión se han recorrido más de 50.000 Km a través de 30 países de Europa y África. La aventura con fines humanísticos ha estado marcada por la dureza y el embrujo que se esconde en el inmenso continente africano.
La caravana se ha compuesto por vehículos, todos ellos con el clásico color naranja de Iveco, de la nueva gama de todoterrenos y por dos de los legendarios ”musoni“ (hocicudos) 330.30 ANW 6x6, específicamente readaptados para soportar los contratiempos de la aventura.
El itinerario ha llevado a los vehículos y a los participantes de la expedición, capitaneada por Beppe Tenti (compuesta por un núcleo de 16 personas en cada uno de los cuatro turnos, para alcanzar un total de más de 40 colaboradores), a recorrer todo el continente hasta Sudáfrica para después volver a subir, atravesando África central, hasta Egipto y concluir el viaje en Roma.
Un recorrido fascinante y ambicioso, tanto por las distancias como por la dureza de muchos de sus tramos por carretera, así como por las barreras geográficas encontradas a lo largo del trayecto, en territorios complejos desde el punto de vista medioambiental, de seguridad y logística, pero sin duda riquísimos por su variedad de poblaciones, paisajes y fauna.
A las dificultades de las pistas africanas, a través de desiertos, sabanas y selvas, se ha añadido el hecho de que la estación de las grandes lluvias se haya anticipado, hasta tal punto que desde Iveco afirman que la décimo segunda edición de Overland se puede considerar, sin duda, la expedición más dura, pero también por ello la más fascinante, de las realizadas hasta el momento.
Por otro lado, la expedición Overland como no podría ser de otra forma también se ha encargado de prestar particular atención al aspecto humanitario, sobre todo en zonas del recorrido que necesitan de este tipo de ayudas.
Para este aspecto de la misión se ha equipado una Daily, con material sanitario, además de cuatro médicos del área de reanimación y primeros auxilios de la Universidad de Parma, los cuales han reunido datos estadísticos y aportado nuevos conocimientos gracias a avanzadas técnicas de telemedicina.
De este modo ha sido posible ayudar al gran número de puestos médicos encontrados en el transcurso de la expedición, pero sobre todo a realizar una intervención de promoción de la salud materno-infantil y de la prevención y el cuidado de algunas de las principales enfermedades que afectan al continente africano.