Mientras aún se puede ver el Maserati GranCabrio MC Stradale en el Salón del Automóvil de París, el preparador DMC nos muestra una versión propia de este deportivo descapotable. El especialista alemán añade salsa a su gusto en el Maserati GranCabrio para hacerle ganar en deportividad, tanto estética como mecánicamente.
Aunque encontramos cambios estéticos en esta preparación de DMC sobre el GranCabrio, el trabajo de los alemanes se centra en la mecánica. El motor V8 de 4,7 litros eleva recibe una inyección de potencia de nada menos que 150 CV, pasado de 440 a 590 CV. Un trabajo que han conseguido a base de retocar el mapeado electrónico, entre otras cosas.
Acompañan los casi 600 CV nuevos elementos en la manida fibra de carbono: un spoiler delantero, con prominente labio incluido, unos faldones laterales y un difusor trasero. Asimismo, se suman unas llantas en negro mate de 19 pulgadas en el eje anterior y 20 en el posterior, además de incorporarse una nueva suspensión deportiva que rebaja la altura del Maserati GranCabrio en 30 mm. De esa guisa y con un llamativo color naranja viste el GranCabrio, que se convierte en un deportivo sacado de videojuego.