Mercedes marcó su segundo doblete de temporada y ha ganado las cuatro carreras del curso con Nico Rosberg. El GP de Rusia demostró que el equipo teutón no tiene sombra, porque si bien Ferrari se afianzó desde inicio de temporada en el rebufo de Mercedes, la fiabilidad les pasa factura. Hamilton pudo ser segundo y Kimi completó el podio.
No ha sido el GP ruso de los mejores de temporada, una vez que los adelantamientos son escasos y que los principales animadores del mundial se vieron penalizados por fallas mecánicas y accidentes al principio de la carrera. Vettel (Ferrari) luego de ser segundo en clasificaciones bajó al séptimo puesto de la parrilla por presentar problemas en la transmisión y sustituir la caja de cambios. Pero ahí no acabaron las cuitas del alemán, quien fue golpeado en reiteradas ocasiones por el Red Bull del ruso Kvyat pocos segundos después de la largada y que lo dejó estampado contra el muro de contención.
No menos sufrió Hamilton, que se quedó sin tiempo en la Q3 el sábado, por problemas en el motor, y luego de titánicos esfuerzos por evitar el remplazo tuvo que ser sustituido por su tercera unidad de potencia. En una espectacular salida del inglés, remontó cinco posiciones, fue el inicio de una escalada que lo colocó segundo, por detrás de Nico. No conforme con esto, Lewis fue por su compañero de filas al que se le acercó peligrosamente. Pero cuando parecía que vendría un final de leyenda, le avisaron por radio a Hamilton que su motor tenía problemas en el sistema de enfriamiento y debía bajar el ritmo. El moreno conservó la segunda posición hasta el final y sumó buenos puntos, pero la verdad es que Nico ya está bien lejos y se perfila como inminente campeón.
Para mi está claro, y si una vez todo el esfuerzo de los de Brackley fueron en pos de Hamilton, ahora la balanza se inclina sobremanera hacia el alemán. Siete carreras al hilo, las tres últimas del año pasado y las cuatro de este curso no es medidor de la diferencia de calidad de ambos pilotos. Muchos problemas para Lewis, cero problemas para Nico hacen nacer la sospecha de que Mercedes desde el garaje domina sus pilotos.
Regresando a Sochi, no fue bueno ver a solo cinco coches y tres marcas terminar en la vuelta del vencedor, porque aunque los de McLaren festejen su sexto puesto con Alonso y su décimo con Button, quedar una vuelta por detrás en un circuito de más de cinco kilómetros no es muy alentador. Los Williams quedaron a la puerta del podio con Bottas cuarto y Massa quinto, lo que los acerca a la tercera plaza por equipos que tiene Red Bull, quienes se fueron en blanco en Rusia. Por otra parte, el debutante Haas acumuló cuatro unidades al pasar la raya de sentencia octavo con Romain Grosjean al volante, puntos que lo afianzan en el quinto escaño por escuderías.
Mención aparte a Sergio Checo Pérez, quien con su raquítico Force India pudo arañar dos unidades cuando terminó noveno en su GP número cien.
La quinta cita será en España y allí esperamos una buena carrera, donde Vettel pueda demostrar el poder de Ferrari, Hamilton su talento, Fernando su calidad. Soñamos, además, con carreras que definan que la F1 es más que un negocio, es la prueba reina del automovilismo.
