Renault 10, una historia a la sombra del R8

Creado: Vie, 11/11/2011 - 14:15
Créditos
Jorge Esténger Wong
Renault 10, una historia a la sombra del R8

Los autos europeos también tuvieron su etapa ”clásica“ en la segunda mitad de los años cincuenta y principios de los sesenta. En ellos se afianzó la imagen de modelos robustos, fiables y económicos; pero también la de vehículos pequeños, angostos, incómodos y con una carencia de potencia que rayaba en la anorexia. Renault presentó en ese período su modelo R8 primero y luego el R10, nuestro protagonista de hoy.

La historia de ambos modelos está indisolublemente ligada, independientemente que el R10 resulta, en realidad, una versión ”upgraded“ del R8. Es en septiembre de 1965, cuando ya el R8 llevaba tres años en el mercado, que la marca francesa decide presentar el R10 (conocido en algunos modelos como R1100 y hasta Dacia 1100) para remplazar el Renault 8 Major. En verdad, la diferencia principal estaba en su  mayor longitud, al crecer el vehículo en los compartimientos delantero y trasero, con mayor amplitud para el área de equipaje. Sin embargo, resulta contradictorio que el habitáculo de pasajeros no recibiera ningún beneficio, mientras el famélico motor de 956 cc y apenas 43 CV de potencia cedió su espacio al cuatro cilindros de 1.108 litros proveniente del Renault Caravelle.

El R10 contó con varias versiones y se mantuvo en producción hasta 1971, cuando cede su lugar al nuevo R12. Durante su existencia fue un modelo en extremo cosmopolita, siendo ensamblado en lugares tan disimiles como Venezuela; Casablanca (en Marruecos); España; Rumanía (Dacia); o Quebec, en Canadá. Como dato curioso señalar que  por su motor trasero y un extremo delantero mayor al R8, el Renault R10 fue un auto preferido por los directores de cine franceses de la época, pues era más fácil colocar el trípode de la cámara para filmar escenas de conducción.

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Jorge Esténger Wong