Robert Marchand con 105 años rompe récord en bicicleta

Creado: Dom, 08/01/2017 - 13:34
Créditos
Willy Hierro Caveda
Robert Marchand con 105 años rompe récord en bicicleta

Los amantes de las bielas y los pedales, que conocen del tema, y los neófitos que se asombran cuando un ciclista recorre más de 200 km en una jornada, todos quedamos atónitos cuando supimos que Robert Marchand a sus 105 años recorrió más de veinte kilómetros en una hora sobre una bicicleta.

Me vinieron a la mente, enseguida, los ciclistas activos más veteranos de Cuba: Angelo, Raúl Vázquez, Wajay, Galio Albelo, Rafael Fuentes y Elier Martín, todos con más de 60 años. Además, Elier tiene el plus de haber ganado recientemente los 200 km Excelencias del Motor y haberlo hecho en menos de siete horas, para quitarse el sombrero.

Pero todo eso quedó eclipsado con la proeza de este añejo francés que desafió no solo la pista, el equilibrio y la tenacidad, sino que le plantó cara al almanaque, puso su corazón a bombear a más de 100 pulsaciones por minuto y recorrió en bici 22.547 km para reinscribirse como el ciclista más longevo en pedalear durante una hora.

Digo reinscribirse porque este extraordinario pedalista ya inscribió su nombre en los registros de la UCI el 31 de enero de 2014, cuando en el mismo escenario, un velódromo enclavado en San Quintín en Yvelines (Francia), a sus 103 años recorrió 26.925 km. Como las categorías máster agrupan ciclistas con diferencia de solo cinco años, Marchand esperó a cumplir 105 para tener ahora dos records: de 100 – 104 años y de 105 – 109  años. El ciclista que más se le acerca, en cuanto a longevidad se refiere es el británico Sidney Schuman, quien a sus 84 años en un velódromo de Londres recorrió en una hora 28.388 km.

De joven quiso ser ciclista, pero fue rechazado por sus entrenadores por su poca estatura. Como el deporte es su pasión, practicó gimnasia y llegó a ser campeón de Francia. Entre sus oficios están: bombero en París, criador de pollos en Venezuela y leñador en Canadá. Antes de enfrentarse a tan insólita prueba, Robert jocosamente declaró: "Si hago 30 km dirán que estaba dopado". Pero broma aparte, Marchand fue sometido a un control antidopaje para que su récord sea válido y registrado por la Unión Ciclista Internacional (UCI).

En su vida no hay grandes secretos para mantenerse en forma: hacer deporte, comer mucha fruta y legumbres, no tomar demasiado café, cero cigarros y poco alcohol. Por lo demás, no sigue ningún régimen y reconoce que sólo come carne una vez por semana porque prefiere el pescado.

A la hora de montar, y lo hace frecuentemente con su entrenador personal y con los cicloturistas de Mitry, localidad en la que reside; tiene dos reglas de oro: la primera es no pedalear por encima de las 110 pulsaciones por minuto y la segunda su única poción mágica, añadir un poco de miel a su botella de agua. Eso me recuerda a Carlos Obregón, ciclista máster matancero que después de ser diagnosticado con cirrosis hepática y pocas posibilidades de sobrevivir se montó en su bici, llenó su tremo con agua de miel y no ha parado de pedalear. Con razón Carlos no se cansa de decir ”El ciclismo me salvó“.

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Willy Hierro Caveda