Los estadounidenses son muy aficionados a estirar el motor de sus muscle car en los semáforos, pero de vez en cuando aparcan sus 'hierros' para batirse en duelo con deportivos internacionales, esta vez los protagonistas han sido un inglés y un japonés.
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El Nissan GT-R se ha ganado el apellido 'mata gigantes' a pulso, multitud de veces se ha enfrentado a deportivos mucho mayores –por precio y características– y les ha destronado de forma casi humillante. Su relación precio-prestaciones es indiscutible, ofreciendo por algo más de 100.000 euros un rendimiento de coches que cuestan el doble, pero el deportivo nipón no solo se atreve con ellos, también está dispuesto a dar guerra a hypercars que superan el millón de euros, como el nuevo McLaren P1.
La batalla entre el Nissan y el impresionante deportivo británico tuvo lugar en las carreteras abiertas de Estados Unidos, concretamente en un semáforo, que a su puesta en verde provocó el duelo entre ambas máquinas. La escena fue grabada desde un Ford Mustang, y lo mejor de todo es el sonido –por lo que recomendamos subir el volumen de vuestros altavoces–. Aunque el motor V6 y la magnífica tracción integral del japonés se permiten plantar cara al P1, parece que el dueño de este último estaba pensando en realizar un rodaje tranquilo, puesto que presumiblemente no hundió el acelerador a tope.
Recordemos que el de Woking produce una potencia máxima de 916 caballos –frente a los 550 del GT-R– y acelera de 0 a 100 kilómetros por hora en menos de tres segundos, en la misma línea que el Nissan con sus 2,7 segundos; donde se desequilibra la balanza es en la velocidad punta, siendo muy superior la del McLaren, que se catapulta hasta los 350 kilómetros por hora, frente a los 315 que alzanza su rival. Esperamos ver próximos duelos, aunque esta vez con el pie derecho a tabla y en circuito, donde se apreciarán mejor las cualidades de cada coche.