Tras superar en 2009 uno de los peores años en la historia de la industria automotriz, el grupo alemán Volkswagen ha iniciado el 2010 pisando el acelerador a fondo, al punto de colocar 1,02 millones de vehículos en el mercado mundial durante enero y febrero, lo que supone un alza del 27% frente al mismo bimestre del año anterior.
No en vano el mayor constructor europeo se ha trazado el propósito de comercializar ocho millones de unidades a medio plazo, una cifra que elevaría hasta los diez millones en 2018, como parte de su estrategia para arrebatarle al gigante japonés Toyota el título de primer fabricante mundial, según reiteró el presidente de la multinacional, Martin Winterkorn, durante la conferencia anual de resultados de la empresa.
Para ello Winterkorn anunció que el consorcio germano mantendrá su ofensiva en los mercados florecientes de Asia y Latinoamérica, principalmente China y Brasil, donde ha cosechado resultados tan positivos frente a los retrocesos de ventas en Alemania y Europa occidental. En tanto, enfatizó el objetivo de la compañía de convertirse en líder de los coches eléctricos, con el fin de fabricar modelos más ecológicos y baratos, para lo cual se ha propuesto que dichos vehículos representen el 3% de sus entregas totales hacia el 2018.
A lo largo del pasado ejercicio Volkswagen comercializó 6,3 millones de automóviles en todo el mundo, registrando un leve incremento del 0,6% respecto al 2008, lo que le permitió elevar su cuota de mercado hasta un 11,3%, del 10,3% contabilizado hace dos años.