Hace tiempo que Volvo lleva tiempo trabajando con la ecuación ”potencia + bajo consumo“ en mente, pero a buen seguro nadie imaginó ni en sus fantasías más salvajes que la marca sueca fuera a ofrecer a sus clientes una combinación de rendimiento y eficiencia como la que traerá el próximo otoño su modelo XC90 T8 Twin Engine, para mayor realce un lujoso SUV de 7 plazas.
Tal es el grado de optimización alcanzado por Volvo en el desarrollo de sus motorizaciones eléctricas que el resultado ha sido una reducción de 10g/km respecto al pronóstico inicial, con un consumo de combustible de tan solo 2.1 L/100 km y más potencia en estado puro, lo que hace que el XC90 T8 Twin Engine se erija en el líder indiscutible de su segmento.
No por gusto ningún otro SUV de su categoría logra ofrecer 43 km de autonomía eléctrica, una capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h en 5.6 s y una potencia mixta de 407 caballos de fuerza, gracias al tren motor que combina un propulsor de gasolina Drive-E de 320 CV con uno eléctrico de otros 87.
De hecho, al arrancar el XC90 T8 aprovecha la excelente respuesta del motor eléctrico, mientras que para ganar velocidad apela el motor de combustión, ofreciendo un mejor par a bajas revoluciones, equivalente al de un motor de gran cilindrada como el V8, a la vez que supera de lejos en eficiencia a sus competidores de motorización híbrida como, por ejemplo, el Porsche Cayenne y el Volkswagen Touareg, que gastan 3.4 y 8.7 L/100 km, respectivamente.
Y es que Volvo ha puesto en marcha una auténtica revolución con sus modelos de tecnología híbrida enchufable como ilustra este nuevo T8 con cinco modos de conducción diferentes que van del modo híbrido predeterminado al eléctrico puro, incluyendo un modo con tracción total (AWD), para permitirle al conductor obtener lo mejor de sus prestaciones según convenga.