Vuelve el Batmovil

Creado: Lun, 26/10/2009 - 16:45
Créditos
Jorge Esténger Wong

La historia del automóvil se va enriqueciendo con el tiempo y así hemos visto como se ha desarrollado una tendencia a reconocer el merito no ya de los modelos de autos reales, bien de competición ó serie, sino de aquellos que nunca existieron. No se trata de autos fantasmas, nada de eso, nos referimos hoy a aquellos que deben su notoriedad a su participación en filmes ó incluso resultaron ellos mismos protagonistas de primer orden.

Así vimos en nuestra columna noticias relacionadas con el Batmovil de los años sesenta y ahora volvemos nuestros pasos sobre el tema para ver en detalle al Batmovil del primer filme de la actual zaga del enmascarado personaje, el cual ya cuenta con la friolera de veinte años, se realizó en 1989, que se nos han pasado a una velocidad imbatible hasta para el mismísimo Bugatti Veyron. Se ha presentado ahora una réplica exacta del auto, tal cual condujo el héroe alado de la película de Tim Burton y que Kruse Internacional ha subastado.

Tras las enormes dimensiones de este batmovil se esconde un modelo trabajado correctamente desde abajo, con un resistente chasis tubular hecho a la medida del modelo. En este caso no hay ningún reactor que lo propulse, sino un ”sencillo“ motor V8 350 de Chevrolet de 5.7 litros con toda su bestial potencia dirigida a las ruedas traseras a través de un cambio automático. Entre sus complementos hay algunos muy interesantes (recordar que hablamos de 1989): tiene una completa suspensión de aire controlable que permite modificar la altura, consiguiendo con eso circular por calles con resaltos o baches sin que la cabeza del conductor termine en el techo. Precisamente los dos ocupantes que caben en su cabina de apertura longitudinal se sentirán, aún hoy, como si estuvieran en un avión pues el cuadro de mandos es muy completo. De las formas no hay quejas, pues los bólidos de hoy aún no lo han tocado y este batmovil se nos presenta tan sobrecogedor como un recién llegado de Gótica. Todo un viaje en el tiempo para quienes vivimos esa época, y una invitación a un recorrido por los más famosos autos 007 en nuestra próxima columna. Los espero.

Créditos
Jorge Esténger Wong