¡Este fue el primer auto de James Bond!

Creado: Dom, 19/06/2016 - 14:48
Créditos
Jorge Esténger Wong
¡Este fue el primer auto de James Bond!

James Bond tiene un sello: mujeres exquisitas y autos extraordinarios. Hemos crecido viéndole conducir obras de arte, no burdos carros con manadas de caballos dentro. Sin embargo, es poco conocido que, como el resto de los mortales, en sus comienzos tuvo que conformarse con un buen auto, pero bastante común en su momento: ¡un Chevrolet!

Continuador de la excelente serie comenzada en 1955, el Chevrolet para 1957 incorporó cambios menores, pues se trataba de un auto excepcional. Para algunos Chevy-especialistas, los ”cincuenta-y-siete“ fueron los peores de esa serie. Sin embargo, allá en los cincuenta eran considerados como ”Baby-Cadillac“ por el público y se creó una fuerte demanda de ellos. Para 1974 la General Motors los definía como…“ el auto en uso más popular de la historia“, lo cual fue cierto hasta que el Escarabajo tomara su lugar.

Ciertamente, la llegada del block V8 ”pequeño“ cambió a Chevrolet y la revitalizó por completo. Luego, con el pasar de los años, los autos demostraron una extraordinaria durabilidad, muy buen performance y bajos costos de mantenimiento, ganándose el sello de ”mejor Chevrolet producido jamás“, y nació la leyenda. En 1957, Chevrolet le introdujo varias novedades, aunque no todas le funcionaron como esperaba.

Una de las más publicitadas fue el sistema de inyección de combustible Ramjet Fuel Injection con el que la marca se convirtió en el primer fabricante estadounidense en obtener 1 CV por cada pulgada cúbica de desplazamiento (recordar que los norteamericanos, aun a día de hoy, no utilizan el sistema métrico). Sin embargo, el comportamiento no fue el esperado y, poco a poco, se desmontaron muchos, por lo que sería interesante encontrar uno que haya sobrevivido.

Fue un año muy competitivo, con una Ford dando batalla como nunca. De hecho, Chevrolet la rebasó en solo 136 unidades vendidas, cifra muy estrecha para las estadísticas de entonces. Ese año, la marca del óvalo azul incluso produjo más autos.   Tan popular se tornaron los modelos de la serie Bel Air que Ian Flemming escogió a uno de ellos para el icónico personaje que estaba creando, siendo el Chevrolet Bel Air convertible el primer auto conducido por James Bond, el superagente 007, en su primera película, Doctor No. Luego vendría la explosión de la saga y las ”preferencias“ del letal espía se tornarían sofisticadas. Pero en sus comienzos rodó, como cualquiera de nosotros, un modesto auto de gran serie.

El Convertible Bel Air 1957 podía llevar un motor seis en línea de 120 CV o un V8 de 162 CV, tenía un precio de fábrica de hasta 2 600.00 USD y se produjeron 47 562 unidades.

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Jorge Esténger Wong