Hyundai Accent 2011, amor a primera vista

Creado: Dom, 29/05/2011 - 18:13
Créditos
Willy Hierro Caveda
Hyundai Accent 2011, amor a primera vista

El Hyundai Accent 2011 llegó a Cuba a finales de abril. Es, ahora mismo, ejemplar único en la mayor de las Antillas pero desde principios del verano será, sin lugar a dudas, el vehículo de mayor demanda en las agencias de renta del Grupo Transtur.

Arribó a la Isla, como lo harán los cientos que vendrán, de la mano de la firma extranjera Tokmakjian Group, quienes representan la marca coreana en el país. Fueron ellos los que pusieron en manos de Excelencias del Motor el auto exhibido en FITUR (Feria Internacional del Turismo 2011), para realizar un Viaje de Prueba.

Este sedán, como su nombre lo indica, acentúa las nuevas líneas de diseño de Hyundai y es de esos modelos que hacen que uno se enamore de ellos a primera vista. El Accent 2011 es un vehículo que por sus dimensiones figura en el segmento B, pero si sumamos todos sus elementos de serie, más los extras disponibles, pudiéramos pensar que se trata de un auto de mayor porte, más aun si tenemos en cuenta  que aumentó seis centímetros de largo (4.34 metros) con relación a la versión 2010.

En su interior, sentado en el puesto del conductor, puedes regular la altura de la butaca, el ángulo de inclinación y la distancia respecto al volante. Luego ajustamos los espejos retrovisores, el interior a mano y los exteriores de manera eléctrica, con mandos en el reposabrazos de la puerta delantera izquierda. Allí están también: los controles de apertura y cierre de los cuatro vidrios de las puertas y bloqueo de los elevalunas. Carece, en la versión probada, del botón de control del cierre centralizado, sin embargo, este se puede accionar desde el manillar de apertura de la puerta del conductor.

El Hyundai Accent 2011  a prueba lo mueve un motor L4, cuatro cilindros en línea, de 1.6 litros de desplazamiento y de inyección directa multipunto (gasolina) que genera 121 CV a 6 000 rpm y un par motor máximo de 155 Nm a 4 200 rpm. Transmite su poder al tren delantero por medio de una caja de cambios automática de cuatro velocidades que se puede manejar en dos modos, directa y secuencial manual.

Nuestro destino de viaje es Cayo Guillermo, un islote que pertenece al archipiélago Sabana-Camagüey, también conocido como Jardines del Rey. Vecino de Cayo Coco, ambos se ubican al norte de la provincia Ciego de Ávila y se unen a la isla grande por medio de un pedraplén –construido en 1988-  que enlaza la ciudad de Morón con el segundo polo turístico más importante de Cuba, después de Varadero.

Para llegar a Ciego de Ávila, el camino más rápido y directo es por la Autopista Nacional, que solo llega hasta la provincia de Sancti Spíritus, son más de 300 km hasta Taguasco. El Accent 2011 se mueve ligero, a un promedio de velocidad de 140 km/h. Viajamos en directa y el consumo se comporta ajustado, teniendo en cuenta el tipo de transmisión que llevamos.

A velocidad constante de 120 km/h el motor gira a 3 000 rpm, con un consumo de combustible puntual de 7.5 l/100 km. Si lo llevas hasta los 140 km/h, el motor sube a 3 250 rpm y el consumo a 7.8 l/100 km y a 160 km/h las revoluciones del motor alcanzan las 3 900 vueltas con un consumo de 8.2 l/100 km. Lo llevamos en directa a tope y el velocímetro registró 189 km/h a 4 500 rpm.

El panel de instrumentos está muy bien logrado, con relojes analógicos a los extremos  –tacómetro a la derecha y velocímetro a la izquierda- con una pantalla pequeña digital, en el centro, donde se refleja: temperatura del motor, nivel del depósito de combustible, datos de la transmisión, kilómetros recorridos y la información de la computadora a bordo. Esta monitorea seis funciones: consumo puntual, consumo promedio, km que puede recorrer con el combustible que lleva, tiempo de manejo, velocidad promedio y reloj.

Fue en Taguasco donde decidimos reabastecer combustible, tanto en la ida como en la vuelta. Allí llenamos el depósito de gasolina, que tiene una capacidad de cincuenta litros. No hubo necesidad, durante el viaje, de rellenar en otro punto, los otros repostes lo hicimos en La Habana cuando realizamos las pruebas de ciudad.

Luego del reabastecer tomamos la Carretera Central. Esta vía, de solo dos carriles, sí atraviesa Cuba de este a oeste. Llegamos a Ciego de Ávila (a 426 km de La Habana) y giramos al norte en busca de Morón, una ciudad que ahora no solo es famosa por su gallo, sino también porque desde ahí nace el pedraplén hacia los cayos.

Construida sobre el mar, en la bahía de Perros, el pedraplén es una carretera asfaltada que tiene como cimiento miles de toneladas de piedra vertidas al mar. En 1992 se remodeló, construyendo puentes que permiten la circulación de agua, un detalle que evita daños medio-ambientales.

Es emocionante recorrer más de doce kilómetros en el Hyundai Accent 2011 por una carretera que se adentra en el Caribe, donde nuestro auto a prueba se deslizó cual velero sobre el mar. Sorprende, en medio del camino, una inmensa torre que anuncia que vas camino al archipiélago Jardines del Rey. En pocos minutos contactamos con Cayo Coco, la cuarta isla en dimensiones del archipiélago cubano. Desde allí, tomamos rumbo oeste para llegar a nuestro destino, Cayo Guillermo.

La consola central del Accent 2011, además de elegante, tiene un acabado de primera. En ella se encuentra el equipo de sonido –con lector de discos en formato MP3, entrada auxiliar para Ipod y puerto USB. Toda la información se visualiza en la pantalla que, junto a los botones situados a sus extremos, nos permite explotar todas las opciones que brinda. Un poco más abajo está el sistema de climatización que, aunque monozonal, enfría o calienta el habitáculo sin esfuerzo apenas.

Pasamos la noche en el hotel Iberostar Daiquirí, una acogedora instalación cuatro estrellas con régimen de Todo Incluido. A la mañana siguiente, después del desayuno, comenzamos el viaje de regreso. Fue un trayecto sin contratiempos donde las llantas de aleación de 14 pulgadas de diámetro, calzadas con neumáticos 175/70 R14 impidieron, gracias a su perfil alto, un desinfle de las ruedas en trechos donde el asfalto estaba bacheado.

Aprovechamos un buen tramo de la Autopista Nacional para manejar en modo secuencial. Así, la celeración se acrecienta sacándole al motor el máximo rendimiento. En segunda y tercera velocidad el motor llega a girar hasta 6 500 rpm. El velocímetro registró en segunda 120 km/h, mientras que en tercera marcó 180 km/h. Tirar la cuarta, a esa velocidad, es todo un evento deportivo. El velocímetro llegó hasta 195 km/h con el motor girando 4 750 rpm.

Resumiendo, los aspectos más positivos del Hyundai Accent 2011 son: diseño exterior, espacio interior (aunque diseñado para cinco plazas, van cómodos cuatro personas en viajes largos), capacidad de maletero, motorización y transmisión. Puede mejorar el confort: un paso más lento de los limpiaparabrisas, mando a distancia del cierre centralizado y mandos al volante, tres puntos que sabemos que el Accent 2011 los tiene disponible a otros niveles de equipamiento.

Excelencias del Motor agradece a Tokmakjian Group, a la agencia de viajes Excelencias Travel y en especial a la firma italiana Resigum por su apoyo en la realización de este trabajo.
 

Créditos
Willy Hierro Caveda