La poco conocida historia del Kübelwagen

Creado: Vie, 15/06/2012 - 00:36
Créditos
Jorge Esténger Wong
La poco conocida historia del Kübelwagen

Es universalmente conocida la historia del nacimiento de Jeep, y para muchos este fue el inicio de los vehículos todoterreno, tal cual los conocemos hoy. Sin embargo, en la misma Segunda Guerra Mundial existieron otros proyectos para producir vehículos similares, e incluso algunos llegaron a materializarse, como fue el caso de los GAZ o nuestro protagonista de hoy: el Kübelwagen.

Por ser un proyecto del eje fascista, la historia del Kübelwagen es mucho menos notoria que la de su similar aliado y, ciertamente, sus prestaciones eran inferiores en muchos aspectos. La mayor carencia del vehículo alemán radicaba en su tracción convencional, trasera, lo cual le impedía un buen desempeño en los duros caminos de una contienda a campo abierto.  Diseñado por el Doctor Ferdinand Porsche, el Kübelwagen era, en realidad, la versión militar del Volkswagen Escarabajo, pero con una practicidad superlativa. 

Sobre el terreno compensaba sus carencias con una funcionalidad extrema, respaldada por el genio creativo de Porsche. El Kübelwagen fue equipado con un cuerpo liviano monobloque sobre una barra de torsión con una suspensión independiente en las cuatro ruedas. Su planta de fuerza era el fiable, y casi irrompible, motor refrigerado por aire de 985 cc y 23.5 CV. Esta característica, además de su confiabilidad y facilidad de reparación, hizo que el Kübelwagen fuera particularmente efectivo en el Norte de África, donde el agua era escasa para los radiadores, y contribuyó al avance más rápido de las tropas del Afrika Korps del General Erwin Rommel. Para maximizar esta versatilidad había versiones que incorporaban un quemador-generador de madera instalado encima del capó que se alimentaba de madera o coque, para suplir las carencias de gasolina. ¡Y caminaban!

El ejército nazi utilizó con profusión el Kübelwagen, del cual se llegaron a producir más de 50 000 unidades. Fue un vehículo que se empleó en el transporte de tropas, aunque era preferido por los oficiales en campaña y, por su probada eficiencia, se realizó una versión anfibia denominada Schwimmwagen. Definir hoy cuan superior era el vehículo norteamericano carece de sentido, la historia lo recoge como el todoterreno por antonomasia, y sabemos que la historia la escriben los vencedores.

Créditos
Jorge Esténger Wong