Lo adelantó el diario económico Nikkei, seguido por una avalancha de medios, y sí, todo parece indicar que el fabricante de automóviles japonés Nissan y su competidor alemán Daimler abrirán una planta conjunta en México para producir hasta 200 000 vehículos al año para los mercados de Estados Unidos y América Latina. Según lo difundido por ambas empresas que están ultimando la operación, además, a través de una joint venture, la firma nipona se encargaría de construir la nueva factoría, mientras que Daimler tendría una participación capital dentro de la inversión aproximada de 1 000 millones de dólares para echar a andar su producción a mediados del 2014.
La nueva planta, cuya locación se decidirá antes del próximo año, podría estar destinada a atender la demanda de las unidades de gama alta de Nissan, Infiniti, y Daimler Mercedes-Benz, entre otros vehículos.
En la actualidad, Nissan maneja ya dos plantas en México. La primera de ellas se estableció en Cuernavaca, Morelos, donde ensambla las camionetas de carga ligera y producirá los llamados ”taxis del futuro“ destinados en primera instancia a dar servicio en Nueva York, y una segunda en Aguascalientes, especializada en vehículos compactos, aunque también se especula que pueda armar el vehículo eléctrico Leaf para su empleo como taxi en ciudades como el DF.
En tanto, Daimler cuenta en la nación azteca con una filial de camiones y autobuses, servicios financieros y distribución de su principal marca, Mercedes-Benz, aunque también planea erigir una planta en Alabama, Estados Unidos, que iniciaría sus actividades en 2014.
Con la nueva factoría mexicana, en todo caso, las dos firmas podrían obtener grandes beneficios, según Nikkei, al compartir la inversión, reducir los costos de las piezas y fomentar la cooperación tecnológica. De ahí que ya en 2010, la alianza franco-nipona Renault-Nissan y el grupo germano Daimler AG habían sellado un acuerdo estratégico para impulsar la fabricación conjunta de pequeños vehículos ecológicos, minimizar costos y alcanzar una mayor participación del mercado en dicho segmento. Su nuevo acuerdo pues, parece ir también por el buen camino.