A partir de enero de 2013 estará disponible la tercera generación de uno de los automóviles más simpáticos que recuerde: el Smart Fortwo eléctrico. Este pequeño carrito trae toda la herencia que ya acumula y propone interesantes mejoras. Veamos.
Como en el resto de la gama Fortwo, existen dos carrocerías: cupé y descapotable, este último con un techo de lona retráctil. El Smart es un auto muy singular, no solo por su concepción de vehículo eléctrico, sino por los diversos planes de compra que la compañía prevé, para dar servicio y garantía a la batería. De esta forma, el cliente puede optar por comprarla o rentarla, esto último por un período de diez años. Claro, que si le ponemos números esto hace un total de más 7 000 USD, casi el precio de un compacto, bien compacto. Pero a lo nuestro, que es el auto.
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Respecto al anterior Fortwo eléctrico hay cambios destacables, con protagonismo para la mayor potencia, que al ser de 75 CV permite una velocidad superior y mejorar mucho la aceleración, si se circula a más de 50 km/h. Según Smart, la aceleración de 0 a 100 km/h es ahora de 11.5 s, para dejar obsoleta la anterior de 26.7 s. También aumenta la autonomía, incrementada en 10 km para alcanzar los 145 km. Para los que gustan de pisar fuerte habrá una versión Brabus con diferencias en la imagen y una suspensión más firme, junto a un motor de 82 CV. Mucho se ha escrito y repetido de cuánto usamos de la descomunal potencia que ofrecen los vehículos de hoy. En este sentido, el Smart Fortwo Electric Drive posiblemente sea el mejor coche que existe para circular por ciudad siempre que no se necesiten más de dos plazas, ni un maletero muy capaz. Es silencioso y suave como solo pueden serlo los autos eléctricos, maniobra muy bien y ofrece una gran agilidad.
Para cargar la batería hay varias posibilidades. La estándar es un enchufe normal que se conecta a la red y tarda siete horas, si es a 220 V, en hacer una recarga completa. Opcionalmente se puede adquirir el llamado wallbox, una caja de conexión que disminuye el tiempo de recarga una hora gracias a una mayor eficiencia en el dispositivo de recarga. Por último, hay un sistema de recarga rápido, que requiere del wallbox y un cargador especial, capaz de cargar la batería en solo una hora. Con el wallbox y conexión a internet es posible programar la recarga, por ejemplo, para que se haga durante la noche, si se tiene contratada una tarifa más barata. También permite ajustar con antelación la temperatura del habitáculo. Si hace frío lo calienta hasta 19 ºC o lo refrigera hasta que alcanza 24 ºC, en caso contrario. No es solo un sistema de confort, sobre todo maximiza la autonomía, al disminuir el uso de la climatización. A su vez, Smart ha mejorado el aislamiento del habitáculo —juntas de puertas y tabique delantero— para que haya menos pérdidas y el climatizador consuma menos energía.