Influenciado en gran medida por el Volkswagen Golf, Skoda hará del Rapid Spaceback un auténtico compacto para rodar en un segmento donde la competencia es voraz.
La meta es clara: plantarle cara a rivales de la talla del Opel Astra e incluso el Ford Focus, por lo que el modelo checo se ha sometido a una renovación total en aras de pegar un salto de calidad ostensible.