La 31 edición de la famosa regata de yates que atraviesa el Atlántico que, este año, cuenta con 297 embarcaciones. El pasado 6 de noviembre salió el primer grupo de 73 cruceros y el próximo domingo 20 parte el contingente principal de 224 veleros. 1 500 tripulantes a bordo de sus respectivos botes.
La amiga Isel (Arte por Excelencias) nos puso al tanto de esta importante regata que ahora cruza el océano Atlántico. La flota, compuesta por cientos de embarcaciones y más de millar y medio de tripulantes, pertenece a 21 países diferentes. Está considerado como el evento de mayor participación en la náutica mundial.
Vuelve a ser la capital de Gran Canaria, La Palmas, ciudad más poblada de ese archipiélago español al borde del Atlántico, el punto de partida. Y la meta es la isla de Santa Lucía de Siracusa, del grupo de Barlovento, a las puertas del Mar Caribe.
Hay dos bitácoras: la principal, que recorre 2 700 millas náuticas (aproximadamente 5 000 km) navega directamente hacia Santa Lucía. La otra, también cruza el Atlántico, pero antes viaja a la ciudad portuaria de Mindelo, en Cabo Verde, para hacer una escala de 3 a 5 días. Luego los barcos ponen rumbo a Santa Lucía a través del Atlántico. Esta ruta es un poco más larga, tiene unos 5 500 km.
La flota que participa en el ”Atlántic Rally for Cruisers“ es cosmopolita, en la cual destacan los británicos, alemanes y noruegos, por su cantidad, pero también hay navegantes australianos, austriacos, belgas, canadienses, dinamarqueses, españoles, finlandeses, franceses, holandeses, irlandeses, italianos, malteses, neozelandeses, polacos, portugueses, suecos, suizos y norteamericanos.
En cuanto a las tripulaciones, las hay de todas las edades y sexos, ya que prima un ambiente familiar y de aventura en cada bote. Por ejemplo, en la regata de recreo con yates de crucero, este año viajan 35 niños menores de 16 años, incluido un bebé de 18 meses, así como un grupo de 43 marinos aficionados mayores de 70 años.
Son, como dijo un viejo marinero en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria al verlos partir: ”grupos de amigos, parejas jubiladas y familias que van en busca de un sueño: cruzar el Atlántic“. La aventura los lleva ¡suerte y feliz arribo a Santa Lucía!