Felipe Massa ha regresado a casa después de pasar más de una semana hospitalizado en Budapest. El grave accidente sufrido en las clasificaciones del GP húngaro va quedando atrás y aunque el camino a la recuperación parece largo, Massa se ve optimista y no desiste en la idea de volver a pilotar, este curso, en su Ferrari. Su monoplaza, que no corrió en Hungría, será conducido en las próximas carreras por la leyenda Michael Schumacher, en espera del retorno del Brasileño.
El subcampeón de 2008 fue operado del cráneo e inducido a coma por varios días, pero su recuperación ha sido muy satisfactoria y los médicos han determinado que puede regresar a casa para la recuperación definitiva. El viaje lo ha realizado, este lunes, en su jet privado acompañado de su médico personal Dino Altmann y su esposa, con cinco meses de embarazo.
Massa parece complacido en que sea Schumacher quien conduzca su bólido rojo mientras se recupera y así lo ha expresado: "Ha sido la mejor elección dejar el coche en manos de una persona tan fantástica y estoy seguro de que todo el mundo se alegrará de volver a verle en la pista," decía Massa, que sin embargo subrayaba que: "aunque espero estar de vuelta en la pista con Ferrari lo antes posible."
El siete veces campeón del mundo en la categoría reina del automovilismo, Michael Schumacher, reaparecerá en el GP de Europa, en el trazado urbano de Valencia, que se correrá el 23 de agosto. Una carrera donde la participación de Renault y Alonso está en veremos.