El Triumph de Santiago

Creado: Lun, 26/10/2009 - 16:42
Créditos
Jorge Esténger Wong

Cuando llega a un semáforo inevitablemente todos le contemplan con detenimiento siendo un poco la envidia incluso de quienes ”ruedan“ monstruos sagrados como los AMG de Mercedes, ó los Audi mayores de 6. Este pequeño auto impacta por su sola presencia y su excelente estado se gana la admiración de todos.

Al momento de redactar estas líneas su dueño, Pedro Santiago González, narraba orgulloso cuantos esfuerzos realizaba para, no solo mantenerlo y cuidarlo, sino para mejorarlo y lograr reponerle todos los elementos originales. Al adquirirlo el auto había sufrido no pocas adaptaciones, propias de los duros años vividos y de los pocos recursos existentes.

Con paciencia y sobre todo mucho cariño comenzó a buscar las partes y piezas que habían sido cambiadas. Así, por ejemplo, fue a dar hasta el central azucarero Duquesne -cercano al heroico pueblo de Yaguajay, en la central provincia de Sancti Spiritus- en busca de piezas del motor de otro Triumph ya descontinuado. De esta forma: buscando aquí, encontrando allá logró restituir hasta las luminarias originales Lucas de fábrica.

Triumph TR-3 Modelo A 1959

Deportivo de dos plazas fabricado por la Estándar Motor Company, de Inglaterra. Tenía un motor de cuatro cilindros alimentado por dos carburadores SU capaz de entregar 90 CV a 4800 rpm. Aceleraba de 0 a 100 km/h en 12 segundos, tenía una transmisión manual de cuatro velocidades hacia delante y overdrive que se accionaba desde un interruptor en pizarra. La suspensión de este simpático bólido era por muelles ballestas detrás e independiente delante con muelles espirales y los frenos de zapata y tambora.

Créditos
Jorge Esténger Wong