La respuesta es contundente, segura y sin rodeos. ¡Nadie! Y es que el duende de Tavullia no sabe lo que es perder en el circuito de casa y lo único que lamenta del fiasco de Le Mans es no poder celebrar en su tierra la victoria número cien. Valentino archivará su triunfo noventainueve en Grandes Premios, cuando le bajen la bandera a cuadros en Mugello. Es por eso que los aspirantes al campeonato, o mejor dicho, al sub campeonato tendrán que ir repartiéndose del segundo al cuarto puesto.
Ud. pensará que estoy loco, por asegurar una cosa que puede cambiar por nada. Pero Il Dottore tiene varias metas este curso y no exagero si digo que las prioritarias son ganar el título y vencer en casa. Otros números que quiere cambiar Valentino son sus 154 podios, para sobrepasar al mítico Agostini, que suma 163. Rossi es el máximo ganador de la categoría reina con 72 triunfos, pero tiene en punta de mate los podios con Yamaha. El campeón se anotó su cajón 64 en Jerez, empatando con Rayne, pero quién duda que el próximo domingo se echará ese récord a sus espaldas.
Los parciales de Lorenzo (Fiat Yamaha), Stoner (Ducati) y Pedrosa (Repsol Honda) que se despidan del título. El borrón de Rossi en Francia no es más que eso, un borrón y cuenta nueva. Claro, no seamos absolutos. Sus perseguidores podrán ganar carreras, como ya lo han hecho Lorenzo y Stoner. Pero sinceramente les digo que de Mugello y el título se vayan olvidando. Y si por eso de las casualidades o los milagros me equivoco, entonces que gane Pedrosa en Mugello, a fin de cuentas el catalán también tiene talento y derecho a meter su gol.