No creo que alguien tenga dudas, las mecánicas serán cada vez más pequeñas, potentes y eficientes. Los L4 (cuatro en línea) están de moda y los diesel brillan en Europa. Por eso BMW no está ajena y actualizó su Performance Power Kit 2011 para motores diesel de 2.0 litros. El mayor rendimiento se obtienen mediante una modificación electrónica principalmente, pero también hay mejoras mecánicas.
Los nuevos programas de multiplexado se suman al aumento de los intercooler que garantizan una mejor refrigeración del motor. Además, se rediseña el escape con doble salida cromada de 74 mm de diámetro. Este sistema, denominado Sports Silencer combina el incremento de potencia con un sonido más deportivo. Si su turbodiésel, antes de colocarle el Performance Power Kit genera 184 CV, la potencia subirá hasta 200 CV, mientras que el par motor alcanzará los 420 Nm.
Así, las recuperaciones de 80 km/h a 120 km/h se adelantaron en un segundo. La aceleración de 0 a 100 km/h ahora ronda los 6.5 segundos y la velocidad punta supera con facilidad los 235 km/h. No se olvide, estamos hablando de un motor diesel de cuatro cilindros en línea, con una cilindrada de 2.0 litros y un consumo medio de 4.7 l/100 km. ¿No les parece grandioso?