El próximo domingo se correrá por primera vez el GP de Singapur, que tendrá la particularidad de ser la primera prueba nocturna en la historia de este deporte. El GP se desarrollará en un circuito urbano, cuarto de la temporada, también de estreno. El trazado tendrá un recorrido de 5.2 kilómetros con 24 curvas y se transitará en sentido contrario a las manecillas del reloj. Esta es la decimoquinta carrera del campeonato y aún no hay nada decidido, con Hamilton (McLaren Mercedes) a la cabeza y Massa (Ferrari) a solo un punto.
Desde que se anunció la carrera nocturna en Singapur, en 2007, ha generado múltiples polémicas, sobre todo por la protección y seguridad de los pilotos. Pero la realización, con todo éxito, del GP de Qatar de MotoGP (nocturna) y las pruebas que hizo la FIA con iluminación artificial en el nuevo trazado citadino, le han dado el visto bueno al GP de Singapur. En el circuito se prevén adelantamientos, sobre todo en las rectas Raffles Boulevard y Esplanade Drive donde la velocidad punta superará los 300 km/h.
Al campeón defensor poco chance le queda, pero Kimi Raikkonen (Ferrari) no se da por vencido y no acepta de ninguna manera ser el escudero de Massa, la opción más sensata de la escudería de Maranello. Por otra parte Robert Kubica (BMW Sauber) hará hasta lo imposible por mantenerse tercero en la lista de pilotos, una tarea difícil pero no imposible.
Otra pincelada de la carrera asiática será la lucha entre las escuderías Toyota y Renault. El equipo nipón ocupa la cuarta plaza de constructores, pero los del rombo están batallando por superarlos antes que finalice la temporada. Esto sería un aliciente para la escudería francesa, quien contó este curso con el retorno de Fernando Alonso sin los resultados esperados.