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Ya todos han hablado y escrito bastante sobre el lamentable accidente de Valentino, pero son pocos los determinados a reclamarle a los directivos del motociclismo mundial acciones que detengan la grave crisis que ya toca a las puertas de MotoGP.
Tanto la FIM, como Dorna y la MSMA, tienen la responsabilidad de tomar medidas inmediatas verdaderamente prácticas y efectivas. No es hora de pañitos tibios. Las resoluciones que limitan los test de los pilotos, las medidas de los pistones o la cantidad de cilindros de un motor y otras, no van a resolver ninguno de los problemas económicos de la categoría reina, eso es algo más que sabido.
En motociclismo el accidente y la lesión forman parte del evento, porque la posibilidad del hecho siempre está presente. En lo que va de campaña sólo han alineado los 17 inscriptos en las dos primeras carreras y sólo en una, terminaron 15. Las caídas suman 11. En LeMans, Bautista no corrió por estar lesionado y ahora Rossi estará fuera por casi toda la temporada. Si son los pilotos los que se exponen, ¿por qué los probadores son los que hacen los test? Total, el gasto de combustible es el mismo y son los que compiten los más necesitados de adaptarse a sus monturas. El otro extremo es la nueva Moto2, para muchos (entre los que me cuento) un laboratorio particular de Honda. En esta categoría todo el que tenga su dinerito compra su moto, no importa de dónde vino ni si tiene alguna experiencia, pero el promedio de caídas por carrera es de 11 y participan unos 40. Todo un éxito, porque son tantos… Veremos qué pasa cuando los huesos empiecen a sonar. Hace rato que no se toca el tema de la seguridad.
A la anunciada nueva moto italiana FB Corse le han exigido tanto que la demora ha provocado la cancelación del contrato por parte de su piloto Garry McCoy y respecto a la española Inmotec, nadie sabe si por fin estará presente en Cataluña. En todos los mundiales de velocidad con motor se ha sentido la crisis, pero mucho menos que en MotoGP. Sabemos que son deportes caros, pero los federativos y dirigentes de esos eventos han sido mucho más flexibles atendiendo a la excepcionabilidad de la situación.
Por otra parte, ni en Japón saben cómo detener la estrepitosa caída en barrena de las celestes. Hasta ahora lo mejor ha sido el 9no puesto en Qatar de Capirossi. Crucemos todos los dedos por la recuperación de Suzuki y quizás evitemos la retirada de dos motos antes que finalice el campeonato.