Son grandes las pretensiones del novato de la temporada 2008. Primero titularse campeón de MotoGP y luego desbancar al ocho veces campeón del mundo y compañero de filas, el italiano Valentino Rossi. Máxime cuando tiene que superar varios escollos, como lo son: Casey Stoner, Dani Pedrosa y Andrea Dovizioso, un trío capaz de cerrarle la puerta antes de que llegue al mano a mano con Il Dottore.
Suponiendo que llegue al cuerpo a cuerpo con Rossi, tampoco le arriendo la ganancia, porque en ese punto Valentino es letal. Pero bien saben los entendidos en la materia que eso de que haya cinco aspirantes al título es de ciencia ficción. Porque, al menos yo, pienso de que el 2009 será una batalla entre Rossi y Stoner, con otros tres pilotos luchando por la tercera posición.
No estoy hablando de carreras, que cualquiera de los cinco las puede ganar, sino del campeonato, que exige una regularidad que solo han exhibido Valentino y Casey. Además, que no se hagan ilusiones con la monogoma, esta lo único que acentuará es la diferencia entre motos y pilotos que, ahora mismo, es bastante grande.
De cualquier manera es bueno ver como jinetes de buen repunte, como Jorge Lorenzo, luchen por un sueño como ese (ser campeón y batir a Rossi). Pero lamentablemente pienso que por ahora no pasará de ahí, de ser un gran sueño.