En una reunión del Consejo Mundial de Deportes de Motor con la FIA, celebrada la semana pasada, se tomaron acuerdos que cambian las normativas técnicas y deportivas de la próxima temporada. El cambio más significativo es la prohibición del control de tracción. A partir de 2008 ningún coche podrá estar equipado de sistemas que impidan que las ruedas motrices derrapen.
La caja de cambios deberá utilizarse durante cuatro Grandes Premios y la sustitución de está antes del tiempo acordado, equivale a una penalización de cinco posiciones en la parrilla de salida. El embrague podrá sustituirse sin penalización.
Con relación a la homologación de los motores, hay muchos componentes auxiliares como: embrague, alternador, bomba de combustible, entre otros, que no están incluidos en el proceso.
También hay cambios en los requisitos de las estructuras de seguridad, las penalizaciones en el pit lane y el cambio de motor por fallos antes del final de la calificación. Como podemos apreciar, parece que los cambios están de moda en la prueba reina del automovilismo.