La casa de diseño italiana Pininfarina, para muchos la más prestigiosa del mundo, presentó para la apertura de este milenio y en conmemoración de su setenta aniversario el modelo Pininfarina Rossa quien se convirtió rápidamente en el superauto del momento. Este prototipo es considerado uno de los coches más espectaculares de la afamada industria automotriz italiana.
Gran parte del trabajo de Pininfarina lo ha desarrollado junto a la legendaria casa de Maranello, donde se fabrica Ferrari, y allí creó su modelo, basado en el 550 Maranello que era en ese momento el auto insignia de la marca.
El diseño es lo más sorprendente de esta maravilla rodante. En él se combinan la onda retro y futurista, un detalle importante es la ausencia de espejos retrovisores sustituidos por cámaras de video. En su interior se muestra simple pero muy elegante donde destacan el cromado y el logo de Ferrari en el volante.
Esta motorizado con una maquina Ferrari, la misma del 550 Maranello, con 12 cilindros en V a 65 grados y 5.5 litros de cilindrada, equipado de 48 válvulas (cuatro por cilindro). Este motor genera una potencia de 486 CV a 7 000 rpm y un par máximo de 568 Nm a 5 000 rpm.
La transmisión es manual de seis velocidades, con tracción el las ruedas traseras, y es capaz de alcanzar los 300 km/h una velocidad que consigue un reducido grupo de autos deportivos de calle.