Después de la polémica decisión de la FIA en el juicio a McLaren, donde la escudería de Woking fue declarada "culpable sin sanción" por falta de pruebas, algo insólito en cualquier querella; los equipos se preparan para el GP de Hungría, oncena prueba de la actual temporada. Este GP se comenzó a celebrar en 1986 en el trazado de Hungaroring, situado a unos 20 kilómetros al este de Budapest, la capital del país.
El circuito mide 4 381 metros con 16 curvas (10 a la derecha y 6 a la izquierda). Dada las características del trazado, y del asfalto (cubierto de polvo), se hacen muy difícil los adelantamientos. De esta manera las clasificatorias del sábado serán vitales para un buen resultado el domingo.
Hamilton (McLaren Mercedes), líder del mundial, ha perdido su amplia ventaja que ahora se reduce a solo dos puntos sobre su compañero de equipo Fernando Alonso. Por otra parte los Ferrari de Felipe Massa y Kimi Raikkonen esperan regresar a la punta de carrera, después que Kimi rompiera su bólido en Alemania y Massa se viera superado por Alonso.
Otros que luchan por el alegrón son los de la escudería alemana BMW Sauber. Tanto Kubica como Heidfeld, saben que un buen crono el sábado les puede dar la esperada victoria el domingo. Algo que hasta hoy, ha sido privilegio de los pilotos de Ferrari y McLaren Mercedes.