La marca checa alista una oferta de electromovilidad disponible para cada segmento del mercado. Le presentamos ahora Skoda y su gama ECO. Conozcámosla.
Que nadie lo dude: la movilidad sostenible es un pilar fundamental en la estrategia “Green Future” de Skoda. De ahí que el fabricante checo se ha puesto como meta que los modelos de su gama ecológica representen al menos el 10 por ciento de sus ventas en 2020.
En el apartado de los vehículos electrificados, la firma espera alcanzar un 3 por ciento de cuota de mercado, frente al 2,2 que posee actualmente.
Para ello, siguiendo los pasos del Citigo iV –su primer modelo cero emisiones de la en 125 años de historia- a finales de este año la compañía de Mladá Boleslav lanzará el Skoda Enyaq, su esperado primer SUV eléctrico, construido sobre la plataforma modular MEB del Grupo Volkswagen, con una autonomía de 500 kilómetros.
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Otra de sus grandes novedades en 2020 es el Superb iV híbrido enchufable, que se ofrece en carrocería berlina o familiar, con un tren propulsor que eroga 218 CV en total y puede conducirse en modo 100% eléctrico durante 57 kilómetros.
Mientras, en el segundo semestre llegará el nuevo Skoda Octavia con versiones GNC (gas natural comprimido), además de una variante híbrida enchufable y con tecnología mild hybrid, a las cuales se unen el Kamiq G-TEC y el Scala G-TEC con sus propulsores de GNC, combustible que dicho sea de paso cuesta un 40 por ciento menos que la gasolina.
Hablando de sostenibilidad, Skoda prevé que para 2025 la cuarta parte de sus vehículos estén electrificados, lo que reduciría hasta en un del 30 por ciento las emisiones de CO2 de su gama con respecto a 2015.
Para ello proyecta incorporar más de diez modelos electrificados para finales de 2022, aunque en sus planes no está el desarrollo de modelos híbridos convencionales ni tampoco propulsados por gas licuado de petróleo o GLP.
