
En la historia del automóvil hay coches que pasan sin pena ni gloria y otros que, sin llegar a producción, logran grabarse en la memoria colectiva por su audacia, diseño o promesa de revolución.
El Alfa Romeo Scighera: un prototipo de altos vuelos que, aunque jamás pisó la cadena de montaje, representa uno de los ejercicios de diseño y ambición técnica más peculiares de los años noventa del pasado siglo.
El nombre «Scighera» proviene del dialecto lombardo y significa «niebla». Una elección poética, si se quiere, para un vehículo envuelto en un aura de misterio. Fue presentado en 1997 en el Salón del Automóvil de Ginebra por Italdesign, el estudio fundado por Giorgetto Giugiaro, con el respaldo de Alfa Romeo.

Lejos de ser un simple ejercicio estético, el Scighera contaba con una base mecánica sobresaliente: un motor V6 biturbo de 3.0 litros derivado del Alfa Romeo 164 y adaptado a una disposición central-trasera. Rendía 400 CV y se combinaba con tracción total y una transmisión secuencial de seis velocidades, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 3,7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 299 km/h. Todo esto en una carrocería construida mayoritariamente en aluminio y fibra de carbono.
El diseño del Alfa Romeo Scighera es inconfundible. Con formas suaves y orgánicas, una parrilla triangular muy Alfa y faros carenados, su silueta recuerda más a un concept car de ciencia ficción que a un deportivo tradicional. A la cabina de dos plazas se accedía de forma peculiar, con unas puertas de apertura dispar en dos partes. Ese y otros elementos acentuaban esa sensación de coche del futuro.

Italdesign desarrolló incluso una variante destinada a la competición, denominada Scighera GT, adaptada a los reglamentos de GT1. Aunque nunca llegó a correr de forma oficial, esta versión era una declaración de intenciones sobre el potencial dinámico del coche.
Hoy en día, el Scighera es una rareza que se conserva en las instalaciones de Italdesign, y ha sido ocasionalmente mostrado en eventos históricos o exposiciones sobre diseño automotriz.
El Alfa Romeo Scighera nunca tuvo el futuro brillante que sus especificaciones y estética hacían intuir, pero eso no le resta valor como hito en la historia del diseño automotriz italiano.
