El perro bulldog es el símbolo o logotipo de los camiones norteamericanos Mack, esta es la historia de la marca Mack y de su bulldog.
La historia de los camiones Mack podría ficharse en 1900, sin embargo, no sería del todo real. Su raíz está antes y comienza con John ´Jack´ Mack, el joven miembro de una familia de inmigrantes alemanes, asentados en su granja de Scranton, Pennsylvania, quien a los 14 años abandona todo para irse a trabajar con los motores de vapor.
Así John ´Jack´ Mack, especializado ya en motores de vapor, laboró tanto en barcos como en muelles de Estados Unidos y Panamá. Hizo dinero para comprar en la ciudad de Nueva York, una pequeña empresa de fabricación de carruajes, en la cual, tras de varios años de experimentación, en 1900, construyen su primer vehículo a motor.
Fue un autobús, con capacidad para 20 plazas. Su motor, de construcción propia, tenía 4 cilindros, cloche tipo cono y caja de tres velocidades. Tuvo un gran éxito y entonces, se funda la empresa Mack Brothers Company, en la que están los cinco hermanos Mack. Para 1904, ya fabrican sus propios vehículos motorizados con el nombre Manhattan.
Al año siguiente, dejan en Nueva York la fábrica de carruajes y se mudan a Pennsylvania. Construyen camiones, que incluye el primero de bomberos, locomotoras y locomóviles. Para 1911, la Mack es la mayor productora de camiones de Estados Unidos, con más de 600 unidades vendidas al año. La I Guerra Mundial (1914-1918) les favorece.
Durante la contienda bélica, Mack abastece de camiones y de las llamadas auto-ametralladoras, a los ejércitos inglés y norteamericano. La compañía se refuerza con inversiones del banco J. P. Morgan y se adquieren algunas otras marcas con vistas a aumentar la producción. Aparecen los modelos AB, los primeros en fabricarse en serie.
Para 1916, los ejércitos del Reino Unido y de Estados Unidos usaban en el frente de batalla, unos 4 500 camiones Mack del modelo AC. Este vehículo era versátil y fuerte, con cierto diseño particular en su parte frontal, el que los soldados británicos lo asociaron al perro bulldog inglés. Y empezaron a llamarlo ´bulldog´.
Hace mucho tiempo, cuando en la campiña inglesa se criaban toros, los granjeros usaban estos perros en su pastoreo. Como su nombre lo indica al traducirlo: bull, toro y dog, perro. Algo así como “el perro de los toros”. Su origen, según historiadores, están en el mastín tibetano, que se fueron expandiendo junto con los navegantes fenicios.
Concluida la guerra, la leyenda del camión Mack AC ´bulldog´, nacida en el campo de batalla, siguió al Mack modelo AC hasta que, en 1921, se dio a conocer al público cuando apareció la imagen en los camiones de ese año. Pero no fue a manera de logotipo o emblema, sino en una pegatina que se colocó en el lateral del vehículo. Al año siguiente, 1922, ya es el emblema de los camiones Mack.
En 1932, se creó definitivamente la imagen tridimensional del bulldog que identifica la marca. Al inicio se colocó en la tapa del radiador, pero cuando los radiadores se “escondieron” dentro de la carrocería, el perro bulldog de Mack salió fuera para ´viajar airoso´ sobre el capó del motor, donde se puede distinguir rápidamente.
Hasta donde sé, es el único logotipo de vehículo automotor, escogido por sus usuarios. El Caballino Rampante de Ferrari, se lo puso Enzo Ferrari; el Toro de Lidia de Lamborghini, lo seleccionó Ferrucio Lamborghini, y así hay otros más; sin embargo, el perro (el mejor amigo del hombre) bulldog, de Mack, fue elegido por los soldados en el fragor de los combates.
Una última observación (para los más acuciosos): si la estatuilla del perro bulldog sobre el capó del Mack, es dorada, significa que ´todas las piezas son originales de la marca´; en cambio, si es plateada, simboliza que ´no todas las piezas son fabricadas por Mack´.
A día de hoy, la marca norteamericana Mack Trucks, es una sociedad por acciones, subsidiaria de sueca AB Volvo desde 2001. Se sede principal está en la ciudad de Greensboro, Carolina del Norte, Estados Unidos.
