Una vez más los vertederos de chatarra están en nuestra mira. En esta ocasión conoceremos la historia de un niño croata que tenía especial predilección por los cómics, el video juego Counter-Strike y los juguetes que se transforman de automóviles a guerreros, que además de coleccionarlos añoraba tener uno de tamaño original.
Danilo Baletic pronto comenzó a materializar su fantasía. En el 2012, con apenas 20 años, creó su primer transformer con desechos metálicos; luego encontró cuantiosos materiales en un basurero de coches que visitó en Podgorica, la capital de Montenegro y empezó a desarrollar sus dotes de artista. Todo podía ser reutilizado y transformado para dar vida a nuevos héroes fantásticos que los niños aún aclaman.
Cuatro años después, en el 2016, exhibía en varias ciudades balcánicas ocho de sus gigantes esculturas en plazas públicas. Las defensas, llantas, parrillas, puertas, cárter, poleadores, tapas de bloc, faroles, maleteros y tuberías conforman las corpulentas figuras de sus esculturas gigantes que miden entren 3 y 8 m de altura y un peso de 2.5 t.
Otra alcanza la fantástica altura de 14 m y 20 t y se expone en Podgorica. Al año siguiente llegó a Milán y durante 2 meses fueron exhibidas en el Museo de Ciencia y Tecnología, luego continuaron una gira internacional por varios países, mientras Baletic sigue creando, tiene 5 en producción incluido el Megatron.
Los transformer de Danilo se roban el show en los disímiles escenarios. Niños y también adultos posan para ser fotografiados dando rienda suelta al espíritu juvenil que emerge al ver las colosales figuras de su infancia.
