El McLaren F1 va camino de convertirse en uno de los superdeportivos clásicos más caros del mundo. Aunque todavía le queda un largo camino por recorrer para llegar a la altura del Ferrari 250 GTO, por el que han llegado a pagar 38,2 millones, lo cierto es que tiene tiempo de sobra. La última unidad en comercializarse es esta roja, con número de chasis 28 y matriculada en 1995.
Su precio es tan elevado como su exclusividad porque los 7,5 millones de euros que ha invertido su comprador han ido a parar a una de las dos únicas unidades en color rojo que existen de este modelo y además, su primer propietario fue el ilustre Michael Andretti. El piloto americano lo recibió como parte del acuerdo con el que llegó con McLaren para abandonar el equipo antes de lo previsto y dejó su firma estampada en uno de los parasoles.
Andretti no pudo conducirlo en Estados Unidos por lo que tuvo que venderlo al año siguiente a un comprador japonés. Éste a su vez volvió a revenderlo a Clifford Meltzer, californiano que lo trajo de vuelta a su país y en 2008 terminó formando parte de una exposición de McLaren en San Francisco.
Ahora, en 2014, conseguir una pieza como esta del mítico supercar de Woking es casi misión imposible, de hecho, el equipo de compra que lo ha localizado aseguró haber dedicado hasta seis meses para su búsqueda, según hemos podido leer en Jalopnik. De momento, se desconoce la identidad del nuevo comprador.