La UCI (Unión Ciclística Internacional) regula el uso de calcetines y alimentos en la ruta, las que tendrán vigencia a partir de 2019.
Entre ellas las que regularán el largo de los calcetines de los ciclistas, que no debe ir más allá de la distancia que media entre el centro del maléolo del pedalista y el de la cabeza del peroné.
Para evitar confusiones desde el momento en que comience a regir esta nueva regulación, el ente rector del ciclismo ha circulado una imagen que se precisa cómo los calcetines no deben sobrepasar la mitad que hay entre el tobillo y la rodilla.
La UCI puntualiza en su normativa, que no se podrá usar ninguna indumentaria que no sea para la protección del ciclista, al tiempo que ninguna otra prenda podrá modificar la morfología de la misma, lo cual supone que la organización ciclística mundial intenta ponerle coto a las modificaciones arbitrarias detectadas en los últimos años en algunos equipos profesionales.
En su afán de evitar las llamadas ventajas “marginales”, la Unión Ciclística Internacional exigirá que la rugosidad de la superficie de la ropa no exceda 1 milímetro como máximo, y los artículos no deben contener elementos auto-portantes o piezas rígidas.
Otros cambios importantes
La UCI también dispuso que el suministro de alimentos para los ciclistas en las pruebas de ruta en el 2019 estará prohibido durante los 30 primeros kilómetros de una carrera, al igual que en los últimos 20; ni tampoco en el kilómetro final antes de que se disputen puntos en la clasificación de la montaña y en los descensos que hayan sido categorizados por la organización.