Jorge Lorenzo llevó su Ducati a lo más alto del podio en una carrera trabajada de principio a fin.
Luego de ver las clasificaciones del sábado, con un Márquez arrollador y unas Ducati rapidísimas, se sabía de antemano lo que sería el domingo. Marc con su Honda salió de la pole, escoltado por la pareja de Ducati comandada por Dovizioso en segunda posición, Lorenzo arrancó tercero. La batalla comenzó desde que se apagó el semáforo y Lorenzo tomó el mando por muy poco tiempo. Márquez, que sabía de su inferioridad mecánica y con una estrategia rara de neumáticos (medio delante y duro detrás) se hizo dueño de la carrera hasta la altura de la vuelta dieciocho.
Durante la primera mitad del GP de Austria, en Red Bull Ring, la lucha se centró por la segunda posición entre los oficiales de Ducati. Quien tiró fue Lorenzo, pero se veía a Dovi controlando la situación con una estrategia de neumáticos (medio en ambas ruedas) que parecía mejor que la de Jorge, quien opto por blandos delante y detrás.
Sin embargo, el zarpazo lo dio Lorenzo a diez del final cuando rebasó a Márquez, pero el de Honda le devolvió el adelantamiento poniendo todo su talento sobre el asfalto. A la vuelta siguiente se fue el mallorquín y ocupó la cabeza de carrera. Dovi, por su parte, le quedó la opción de mirar los toros desde la barrera y conformarse con la tercera posición.
Quien no se conformó fue Márquez, que a tres vueltas del final volvió a tomar la punta y rodó al 101 %, pero la destreza de Lorenzo sumada a la superioridad de la moto boloñesa puso las cosas en su sitio para que Ducati se apuntara su quinto triunfo del curso, uno menos que Honda, y Lorenzo disfrutara de su tercera victoria de temporada.
El cuarto lugar de Crutchlow, sobre su Honda LCR Castrol, demuestran la valía del piloto inglés. Pero Cal pasó a casi diez segundos de Lorenzo, un tiempo muy largo. Peor aún quedó la Ducati Pramac de Petrucci, a trece segundos, una moto de este año y con apoyo de fábrica, algo que deja al piloto italiano mal parado cuando Ducati espera mucho de él para la venidera temporada.
Yamaha sufrió el sábado con Valentino fuera de la Q2, pese a que el de Tavullia remontó el domingo hasta terminar sexto. La segunda moto del Movistar, pilotada por Viñales, acabó decimosegunda, un puesto por detrás del conseguido en clasificaciones. Los de Iwata siguen de más a menos, así lo demuestra la tabla de clasificación. Ahora son terceros en la carrera de constructores y terceros por equipo, clasificaciones que dominan Honda y Ducati, en ese orden.
