
Fundada en 2013, la Cooperativa Taxi Rutero 1 comenzó con una flota modesta de 43 ómnibus y una visión clara de transformar el transporte público en la capital cubana. Desde sus primeros años, la cooperativa mostró su capacidad de adaptación y crecimiento, estableciendo rutas estratégicas que conectaban importantes zonas urbanas.
Un desarrollo notablemente exitoso. En 2018, solo cinco años después de su fundación, transportaba a más de 7 millones de personas, superando significativamente sus expectativas iniciales con un cumplimiento del 101 % de su capacidad proyectada. Esta cifra representa un crecimiento extraordinario si se compara con los 1.2 millones de pasajeros que movilizó en su primer año de operaciones.
Pero la mayor fortaleza de la cooperativa radica en su estructura organizativa basada en la participación activa de sus socios, encabezados por Alexander Leyva, su presidente, generado un sentido de pertenencia que se traduce en mayor eficiencia y compromiso con el servicio, y en estrecha colaboración entre conductores y mecánicos para garantizar el estado óptimo de los vehículos. Así lo corrobora Alexey García, mecánico, quien dice crecerse constantemente en la búsqueda de soluciones ante las dificultades que se presentan. «Lo más importante es que el servicio salga y salga bien».

Esa propia fortaleza se consolida y revierte en resultados y proyecciones a partir de los retos que imponen los nuevos tiempos. Y es que luego de 2020, con la llegada de la pandemia Covid–19, la Cooperativa Taxi Rutero 1 asume la responsabilidad del servicio a centros hospitalarios y centros de aislamientos, además de apoyar a otras empresas de producción.
Al concluir la pandemia, y ante las difíciles condiciones sociales del país, se les asigna continuar el apoyo de la transportación del servicio de salud pública, educación y a las internas vinculadas a las tareas de higienización sanitaria en centros hospitalarios. Pero Taxi Rutero 1, en su vínculo estrecho con la sociedad, va mucho más allá y entrega no solo un servicio, sino también el compromiso, la calidad y el corazón de cada uno de sus trabajadores.
Yoslaydi López Fonseca, chofer, mujer, quien estuvo directamente en el servicio en ruta desde 2017, asume ahora la movilidad de personal de salud y pacientes de hogares maternos. Allí, ha entregado mucho más que su experiencia al timón. O Abel López Ferrer, quien, desborda nobleza en su timidez y pertinencia, pero se ha ganado el respeto del equipo de Biomedicina por su ejemplaridad y compromiso. Ello habla por sí solo de la calidad humana de este colectivo.

Hoy la movilidad de trabajadores de 9 hospitales y más de 60 centros escolares en toda la capital está garantizada en tiempo y forma por la cooperativa. Asimismo, apoyan el Campamento Bolodia y hogares de niños sin amparo familiar. Es importante resaltar también la atención que brindan al Puesto de La Habana, con la transportación de trabajadores portuarios encargados de la descarga de buques de alimentos para la canasta básica.
¿Y la población? Pues, aunque en ocasiones se ha visto afectado por las dificultades que atraviesa el país con el tema combustible, también tiene sus servicios en ruta luego de concluir los compromisos asumidos.

En su 12 aniversario, la Cooperativa Taxi Rutero 1 no solo tiene motivos sobrados para celebrar con júbilo, tiene resultados, compromisos, y un equipo de una estirpe humana inigualable. Llegue a todo su colectivo las más merecidas felicitaciones.

Fotos: Sergey Montalvo Aróstegui