Lo difícil no es ponerle precio, sino pagarlo: más de un millón de dólares. Se construyó en Francia por una de las empresas más importantes de los primeros tiempos de la Historia del automóvil: De Dion-Bouton et Cie. Utiliza para andar un motor de vapor cuyo combustible puede ser carbón, papel usado o maderas de desecho. Fue fabricado antes que Daimler o Benz patentaran los suyos. A su velocidad máxima, pasa los 60 km/h.
La crisis económica ha sacado a la luz piezas de museo que estaban bien escondidas en las arcas de multimillonarios y que ahora sirven de tabla salvadora a esos ricos sin fortuna. Uno de los primeros autos fabricados por la firma francesa De Dion-Bouton, salió a subasta hace tiempo por la cifra entre 1.5 y 2 millones de dólares. El auto se construyó en 1884, dos años antes de que Daimler o Benz patentaran los suyos, con motor de explosión.
Es probable que algún nuevo rico lo compre, mas lo trascendental es haberlo expuesto al público y saber hoy que uno de los automóviles de hace más de 125 años, está funcionando. Qué suerte que pudo llegar intacto hasta nosotros. En los albores del automóvil, los países más desarrollados en esa esfera eran Francia: con Panhart & Levassor, Peugeot y De Dion-Bouton, y Alemania: con Daimler y Benz.
De la tríada francesa, la firma De Dion-Bouton fue la primera en construir autos de vapor. El conde Alberto De Dion nació en Nantes, Francia, allá por 1856. A los 16 años (1872) hizo su primer intento, fallido, para hacer una máquina de vapor. Jorge Bouton, mecánico de oficio, nació en los barrios marginales de París, en 1847. El conde Alberto compra cierto raro juguete en 1882: una máquina de vapor en miniatura que funciona perfectamente. Lo fabrican Bouton y Trépardoux.
En el desvencijado taller de Bouton, aparece el conde Alberto. El aristócrata de 26 años, es intrépido e impulsivo; el mecánico, de 35 años, es pausado y habla despacio. La Historia recoge este pequeño diálogo:
- ¿Qué desea el señor?
- Quiero hacer un motor de vapor como los que construyes en miniatura, pero grande, con la sufriente potencia para mover un carruaje de caballos.
- Pero señor, eso costaría mucho.
- ¿Cuánto tú ganas?
- 8 francos por día
- De ahora en adelante ganas 10. Ponte a trabajar.
Así se forjó una de las más brillantes empresas de los primeros tiempos del automóvil. Al año siguiente (1883), salía el primer automóvil De Dion-Bouton. El que se vendió recientemente por más de un millón de dólares, es de esa época, del año 1884. En poco más de 10 años de labor, la firma De Dion-Bouton et Cie, fabrica más de 450 autos de vapor. En 1894, el periodista Pierre Giffard convoca a la primera carrera de automóviles del mundo desde el diario Petit Journal. En breve se acumulan 102 inscripciones.
¡Demasiadas! Quedan 21 seleccionados. El trayecto: París-Rouen, 126 km, ida y vuelta. El automóvil de vapor De Dion-Bouton que compite es único: conduce Jorge Bouton y en un tráiler, colgado detrás de la máquina, van El conde Alberto y el periodista Giffard.
Resultados: 1er lugar: De Dion-Bouton, 5 minutos después, 2do lugar: Peugeot, 3ro: Peugeot, 4to: Panhard y 5to: Peugeot, todos con motores Daimler. Pero esa es otra historia que puedo contar si lo deseas.
La firma francesa De Dion-Bouton fabricó autos, con motores de gasolina luego, hasta 1932. A fines del siglo pasado, construía pequeños karts.