A principios de la década del 80, una berlina de cuatro puertas con espíritu deportivo era una verdadera rareza y por ello el departamento BMW Motorsport preparaba el singular proyecto que pondría en las calles de todo el mundo al el BMW M5, la variante deportiva del Serie 5 E28. El vehículo estuvo listo para 1984 y a partir de ahí, las sucesivas generaciones del M5 serían toda una referencia en el segmento, ofreciendo prestaciones a la altura de verdaderos deportivos camufladas en una estética bastante discreta para el potencial que encierran.
Actualmente, el BMW M5 dispone de un V10 de 5.0 litros y 507 CV, que tiene su origen en el motor BMW del Williams F1 de hace unas cuantas temporadas.
En el Salón de Ámsterdam de 1984 se presentaba el primer BMW M5. Basado en la carrocería del BMW Serie 5 E28, montaba el mismo motor que el BMW M1: un 3.4 litros de 6 cilindros que entregaba 286 CV y un par máximo de 340 Nm. Gracias a él, podía alcanzar los 245 Km/h y acelerar de 0 a 100 Km/h en 6.5 segundos, algo que era realmente destacable hace 25 años. Exteriormente, apenas se distinguía del resto de Serie 5 por pequeños detalles con el logo BMW M en la parrilla frontal y la parte trasera. Para su segunda generación habría que esperar hasta 1989. Basado en el Serie 5 E34 aparecido en 1988, con un diseño muy sobrio pero que ha resistido muy bien el paso del tiempo, equipaba un 3.5 litros de 6 cilindros con 315 CV y 360 Nm de par máximo. Las prestaciones apenas mejoraban respecto al primer M5: podía alcanzar los 250 Km/h y los 100 Km/h desde parado en 6.3 segundos.
La verdadera tercera generación del BMW M5 aparecería a finales de 1998, sobre la base del BMW Serie 5 E39. Las prestaciones mejoraron ostensiblemente, cubriendo los 100 Km/h con salida desde parado en tan sólo 5.3 segundos, mientras que la velocidad máxima continuaba limitada a los tradicionales 250 Km/h. Y llegamos al año 2005, donde aparece el actual BMW M5. Basado en el Serie 5 E60, y también disponible en versión Touring, el V10 de 5.0 litros fue un gran desarrollo de ingeniería y entrega más de medio millar de caballos y 520 Nm de par máximo. Gracias a los 507 CV cuando se pulsa el botón Power, el 0 a 100 Km/h se puede realizar en 4.7 segundos, una cifra al alcance de no demasiados deportivos y de muy pocas berlinas. ¡Enhorabuena M5!