Con el Salón de París ya a la vuelta de la esquina, del 27 de septiembre al 14 de octubre próximo, siguen filtrándose a cuentagotas en la red los modelos que debutarán en sus stands y uno de los últimos en salir a la palestra ha sido la versión familiar del Mazda 6, cuyo sedán ya se presentó a finales de agosto en el Autoshow de Moscú.
Y no es fortuito, la verdad; toda vez que el fabricante japonés ha anunciado que este modelo constituye el buque insignia de una nueva generación de productos de la marca. De modo que entre las principales novedades de esta vagoneta resalta el nuevo lenguaje de diseño Kodo (algo en movimiento), iniciado por el concept Takeri, cuyas formas fluidas y aerodinámicas le ofrecen una impronta deportiva, que no se pierde en absoluto en esta versión familiar, pese al aumento de tamaño del maletero.
Eso, y el arsenal tecnológico SKYACTIV, que el Mazda6 Wagon incorpora de lleno con el motor diesel SKYACTIV-D 2.2, ya estrenado en el CX-5, que se espera esté disponible con dos potencias: 150 y 175 CV, que cumplen con la norma Euro 6 sobre emisiones; así como los gasolineros SYACTIV-G 2.0 de 147 CV y SKYACTIVE-G 2.5 de 189 CV. Todos equipados con el sistema i-Stop de parada y arranque, junto al sistema i-ELOOP de regeneración energético durante la frenada para dejar la menor huella posible en el medio ambiente.
En tanto, no faltarán tampoco elementos enfocados al confort y la seguridad, como el sistema de control de luces, con un sensor que detecta la aproximación de otros vehículos evitando de forma automática los deslumbramientos, el dispositivo de cambio de carril involuntario, el de arranque en pendiente o la frenada automática de emergencia, que se activa al detectar un obstáculo cuando se circula a menos de 30 km/h para desafiar a rivales de la talla del Chevrolet Cruze SW. La nueva ola de Mazda, a fin de cuentas, ya está en marcha.