El fabricante estadounidense Ford invertirá 3 000 millones de dólares en México, en lo que representa la operación más importante en la historia de la industria manufacturera en ese país. Según informó el presidente del grupo, Alan Mulally, dicha operación estará destinada a modernizar una ensambladora de automóviles y una planta de motores, además de la construcción de una fábrica de transmisiones.
Sin lugar a dudas, es esta la mayor inversión de la historia en el sector automotriz de esa nación desde que, precisamente, Henry Ford estableció la primera planta en México en 1925.
En principio, el proyecto contempla la rehabilitación de la planta de Ford en Cuautitlán, particularmente para la producción del nuevo modelo Fiesta que será distribuido a nivel internacional, así como la ampliación de la planta de Chihuahua, en aras de alcanzar una capacidad de producción de 800 000 motores por año.
En tanto, una tercera etapa incluye una inversión conjunta de Ford y su socio alemán GETRAG, para crear una nueva planta de transmisiones en Guanajuato.
Así, la compañía, que apenas en el primer trimestre de 2008 regresó a los números negros tras varios años de pérdidas consecutivas, generaría unos 30 000 empleos directos e indirectos, en tanto su gestión equivaldría a más del 13 por ciento de la inversión extranjera directa total registrada el año pasado, cuando México recibió 23 600 millones de dólares.