El francés Sébastien Ogier (Citroën DS3) ganó el Rally de Alsacia, 11 prueba del Mundial WRC, en Haguenau, por delante del español Dani Sordo (Mini Cooper), segundo, y del noruego Petter Solberg (Citroën DS3), tercero.
Con esta victoria, Ogier se pone, con 193 unidades, a tres puntos de su compatriota y compañero de equipo Sébastien Loeb (196) en la clasificación del Mundial de pilotos, cuando sólo faltan dos pruebas para el final de la temporada.
Además, Ogier realizó el tercer mejor tiempo en la ES23, una superespecial de 4 kilómetros trazados en el centro de la ciudad de Haguenau, rendimiento por el que sumó un punto más a los 25 de su triunfo en tierras galas.
Este domingo, a Ogier le bastaron 6 segundos y 3 décimas de segundo para superar a Dani Sordo, que había acabado el primer día de la prueba en el liderato, mientras que Solberg terminó a 1 minuto y 23 segundos del francés.
La tercera jornada, en la que se disputaron 40 kilómetros cronometrados en seis pruebas especiales no cambió la composición del podio del Rally de Alsacia, pese a que Sordo apostó por atacar en las primeras horas, con su Mini llevando neumáticos blandos.
Por su parte, Ogier fue más prudente, y salió con las gomas más duras de Michelin, y con dos ruedas de recambio, y al contrario de lo que ocurriera en México y en Australia, acabó llevándose la victoria.
Sordo no tiró la toalla, y no tuvo miramientos para competir contra la escudería en la que fue fiel lugarteniente de Loeb durante cinco años, pero se quedó sin el premio de la victoria.
Su segunda posición en Alsacia es sobre todo un buen resultado par su escudería Mini, en su cuarto rally, 40 años después de que fuera el equipo que se impusiera en la mítica cita de Montecarlo.
Pese a no llevarse el triunfo, Sordo y su escudería dieron cuenta con el resultado de su coche este fin de semana que el Grupo BMW tiene los medios para competir, especialmente en las especiales.
La prueba también estuvo marcada por el abandono, el viernes, del líder del Mundial, Sebastian Loeb, que vio como su motor se estropeaba en plena competición.
Aún así, el buen rendimiento en Alsacia de Ogier permite a Citroën seguir al frente y con comodidad en la clasificación general del Mundial de escuderías.