La noticia fue súbita pero placentera: el piloto noruego Petter Solberg creó y encima presentó oficialmente su propio equipo para disputar el Mundial de Rallyes, y se evitó así la incertidumbre de quedarse todo el año estancado, debido a la salida de Subaru.
En vez de esperar una contratación divina, el campeón mundial del 2003 consiguió el patrocinio de la naviera noruega Johs Lunde, compró un Citroën Xsara WRC 2006 con diferencial delantero y posterior activo, y se unió al navegante Phil Mills para disputar las restante 11 pruebas del campeonato.
Además, Solberg se acordó de sus compañeros de Subaru y se trajo como director a Ken Rees, junto al mecánico Tore Dahl y al ingeniero jefe Charles Hodge, en tanto la empresa de Francois Xavier de Maison se encargará del mantenimiento entre pruebas.
En resumen, el ”Petter Solberg World Rally Team“ nació seis días antes del Rally de Noruega, próxima parada de un certamen que comenzó con doblete de Citroën C4 y triunfo del pentacampeón y amplio favorito, el francés Sebastián Loeb.
Con un máximo de 18 puntos, la marca gala pasó a comandar la clasificación de Constructores con 10 puntos de ventaja sobre su archirrival Ford, un inicio de año considerado perfecto por el Olivier Quesnel, director deportivo de Citroën.
”La próxima cita será en Noruega, y no estoy seguro de cómo nos irá. No somos los favoritos. Prefiero sumar el máximo de puntos ahora y estar en una buena posición después“, declaró Quesnel, quien conoce sus limitaciones fuera del asfalto.
Noruega presenta una prueba extrema, donde los pilotos deberán lidiar con la nieve y el hielo, sobre todo en las regiones de Kongsvinger y Lillehammer, localidad que incluso fue sede de los Juegos Olímpicos de Invierno en 1994.
Todas las pistas están cubiertas por una gruesa capa glacial, más enormes taludes de nieve en los bordes de las carreteras, y los pronósticos son hasta ahora de nevadas y temperaturas inferiores al punto de congelación durante los tres días del rally.
Con sede central en Hedmark, 125 kilómetros al noreste de Oslo, esta prueba trae nuevos tramos en su itinerario de 360,90 kilómetros, entre parajes boscosos, mesetas y montañas, con el reglamentario neumático Pirelli modelo ”Sottozero“ con clavos.