El Peugeot 3008, que vio la luz en 2009, fue desde su creación un auto difícil de categorizar porque se encontraba en el punto medio entre un monovolumen y un SUV. Cuando se actualizó en 2014 poco cambió y en cuanto a carrocería se mantuvo en el mismo sitio. Sin embargo, a mi modo de ver las cosas yo lo catalogué como un monovolumen. Ahora la nueva versión 2017 es completamente nueva y esta vez la balanza se inclina hacia los SUV.
Está fabricado sobre la plataforma modular EMP-2 (Efficient Modular Plattform 2) que ya se utiliza en otros modelos del Grupo PSA, como por ejemplo el 308. Con el uso de esta nueva plataforma se logró que el nuevo modelo tenga una media de 100 kg más ligero que la versión anterior. Mide 4.45 m de largo, 1.84 m de ancho y 1.62 m de alto, con una batalla de 2.67 m.
En cuanto al apartado de motores está compuesto por dos propulsores de gasolina (1.2 PureTech 130 y 1.6 THP 165) y cuatro diésel (1.6 BlueHDi 100, 1.6 BlueHDi 120, 2.0 BlueHDi 150 y 2.0 BlueHDi 180). Todos con un sistema de encendido y apagado automático del motor en las detenciones (Start&Stop). La tracción es al tren delantero por medio de una caja de cambios manual de cinco o seis velocidades, en función del motor elegido. Los motores 1.6 THP 165 CV y 2.0 BlueHDI 180 se acoplan a una transmisión automática de convertidor de par con seis velocidades denominada EAT6.
Se presenta con cinco niveles de equipamiento: Access, Active, Allure, GT Line y GT; no obstante, el nivel GT es exclusivo para la motorización diésel de 180 CV. Algunas versiones pueden tener el sistema Advanced Grip Control, que forma parte de un paquete de equipamiento en el que también se incluyen unos neumáticos con especificaciones M+S (barro y nieve) y un sistema de control de descenso en pendientes.
El maletero del nuevo 3008 tiene una capacidad de 520 L, lo que representan 88 L más de volumen que el modelo que sustituye. Además, el baúl presenta una tabla divisoria rígida que se puede colocar a dos alturas para generar dos espacios independientes: zona principal y doble fondo. En cuanto a la configuración de la instrumentación, similar a la que ya tienen otros Peugeot, está diseñada para que el cuadro de instrumentos se vea por encima del volante y no a través de él (Peugeot lo denomina i-cockpit). La novedad es que la pizarra es una pantalla de 12.3 pulgadas con cinco modos de visualización.